Unas 21.000 personas fueron evacuadas este sábado en Coblenza, en el oeste de Alemania, durante el tiempo necesario para desactivar una bomba de la Segunda Guerra Mundial, en la víspera de otra operación de desminado de gran envergadura en Fráncfort.
Las personas afectadas pudieron regresar a sus casas a media tarde, después de que los artificieros desactivaran el artefacto de unos 500 kilos de origen estadounidense, anunciaron los bomberos.
El domingo, más de 60.000 personas deberán abandonar sus hogares en Fráncfort (oeste) para permitir que los artificieros neutralicen una bomba de 1,8 toneladas utilizada por la Royal Air Force británica durante el conflicto mundial.
Se tratará de la mayor evacuación de este tipo en Alemania desde la Segunda Guerra Mundial.
Los intensos bombardeos aliados contra Alemania todavía obligan a las unidades de desminado a neutralizar con frecuencia bombas de aquella época, desenterradas en obras de construcción, en bosques y campos.