Hapag-Lloyd y United Arab Shipping Company (UASC) anunciaron este miércoles el cierre de la fusión de sus negocios, convirtiéndose así en la quinta mayor naviera portacontenedores del mundo.

La empresa combinada tendrá una capacidad total de transporte de carga de 1,6 millones de TEUs y volúmenes transportados al año de alrededor de 10 millones de TEUs. Contará además con una flota de 230 naves y un tamaño promedio de aproximadamente 6.840 TEUs, cerca de un 30% más que la media de las 15 principales navieras de la industria (5.280 TEUs).

Se estima que la fusión entre Hapag-Lloyd y UASC generará sinergias anuales de US$435 millones, las que se alcanzarán en su totalidad en 2019. Además, la compañía prevé que se reducirán significativamente las necesidades de inversión durante los próximos años, gracias a la complementariedad de los activos combinados.

"En el futuro vamos a disponer de una posición de indudable fuerza en el mercado, no solo en Latinoamérica y el Atlántico, sino también en Medio Oriente, donde vamos a ser uno de los ofertantes líderes. Nuestra prioridad ahora es que UASC se integre en Hapag-Lloyd muy rápidamente y sin problemas", destacó Rolf Habben Jansen, presidente del Consejo de Administración de la compañía.

Con el cierre de la transacción, Hapag-Lloyd adquirió el 100% de las acciones de UASC. Los actuales controladores de la firma árabe -Qatar Holding LLC, propiedad del Estado de Qatar, y Public Investment Fund, en representación del Reino de Arabia Saudita- ingresaron a la propiedad de la naviera alemana, con un 14,4% y 10,1% de participación respectivamente. Los accionistas minoritarios de UASC recibieron en conjunto acciones por un 3,5% de la empresa combinada.

Producto de lo anterior, los actuales accionistas de Hapag-Lloyd redujeron su participación en la empresa. La Compañía Sud Americana de Vapores (CSAV), se mantuvo como principal accionista, pasando de tener un 31,4% a un 22,6% de la propiedad. Sin embargo, tanto la empresa chilena, como la Ciudad de Hamburgo y Kühne, a través del pacto de accionistas vigente, se mantienen como los controladores de Hapag-Lloyd con una participación combinada de 51,5%.

Con el fin de fortalecer la estructura financiera de la compañía combinada, y dentro de seis meses a partir de hoy, Hapag-Lloyd realizará un aumento de capital por US$400 millones, a través de una suscripción preferente para todos los accionistas. Las nuevas acciones de pago se ofrecerán en la bolsa en Alemania.

Con anticipación al cierre de la transacción, CSAV, la Ciudad de Hamburgo y Kühne habían acordado que, a través de dicha capitalización, la empresa chilena alcanzará una participación de 25% en Hapag-Lloyd, con lo cual podrá seguir influyendo  en la adopción de acuerdos en juntas de accionistas en materias como aumentos de capital, fusiones, divisiones, y modificaciones de estatutos, todas las cuales requieren un quórum de aprobación de 75%.

Los fondos que CSAV utilizará para suscribir dicha capitalización los recaudará a través de un aumento de capital por hasta US$260 millones, que ya fue aprobado por los accionistas de la compañía en una Junta Extraordinaria realizada a fines de marzo.

"No obstante el positivo impacto económico que conlleva esta operación producto de las sinergias estimadas, la fusión de Hapag-Lloyd con UASC le generará a CSAV una pérdida contable por dilución, cuyo monto no puede ser cuantificado en estos momentos, dado que la información necesaria para realizar dicho cálculo dependerá del registro contable que Hapag-Lloyd realice de la transacción, lo que estará disponible cuando ésta publique sus estados financieros consolidados intermedios al 30 de junio de 2017", precisó CSAV.