A un año de la muerte de Flora Inostroza, creadora del certamen musical de Frutillar que el próximo año cumplirá 50 años, hoy se inauguran las primeras Semanas Musicales a cargo de su nueva presidenta, Harriet Eeles (1944). La falta de tiempo, los nuevos desafíos y preparativos para el próximo año, cuenta, han sido parte de lo que ha tenido que vivir a la cabeza del ciclo que se extenderá hasta el 5 de febrero y que esta tarde, en el Teatro del Lago, abrirá con la usual presentación de la Banda Sinfónica de la Fuerza Aérea de Chile, que mañana volverá a subir al mismo escenario junto a Los Jaivas.
Harriet Eeles se integró al directorio de las Semanas Musicales en 1994 y en marzo del año pasado asumió la presidencia. "Hasta ahora dedicaba menos tiempo a las Semanas Musicales y más tiempo a mi trabajo en la Cooperativa de Productores Apícolas. Me falta tiempo. Ha sido un cambio grande", cuenta. "A pesar de que estoy participando en el directorio desde hace unos 20 años, con la señora Flora el trabajo principal se hacía entre el comité ejecutivo. Los demás teníamos poca participación durante el año".
¿Cuál cree que ha sido su sello?
Hemos tenido que repensar la forma de trabajo y una cosa muy importante ha sido incorporarlos a todos. Estamos como una gran familia, cada uno tiene su rol, y cada uno es igual de importante para poder crear esta tremenda producción de 10 días de conciertos en el Teatro del Lago.
¿Cómo es su relación con la música clásica?
Este año me dediqué principalmente a la gestión. En lo musical aún tengo una brecha grande que espero ir profesionalizando este año. No pretendo convertirme en músico ni mucho menos, pero sí tomar algunos cursos para aprender a leer música, estudiar lo contemporáneo y clásico, además de a los compositores.
¿Cuál es el sello de esta versión de las Semanas Musicales?
Estamos a la víspera de celebrar nuestros 50 años, entonces todos nuestros esfuerzos van a ser mirando al próximo año. Vamos a mostrar, espero, que el evento está a la altura del legado de la señora Flora y que somos capaces de continuar con los mismos estándares de calidad. Además, creo que tenemos una apertura a distintas expresiones musicales y que contaremos como nunca con jóvenes ganadores de concursos que están empezando una carrera profesional en la música.
¿Qué le gustaría dejar como legado?
Pretendemos postular a Frutillar para declararla como ciudad creativa de la música por la Unesco. Sería un tremendo logro. No solo para la Corporación Cultural sino también para la comuna. Tenemos que mostrar que esto no se basa solamente en que tenemos las Semanas Musicales, el Teatro del Lago y algunas agrupaciones en la ciudad. La aprobación dependerá de cómo nos proyectemos hacia el futuro para que la música sea integrada a todo nivel de la comunidad en forma transversal.
¿Y más a corto plazo, cuando cumplan 50 años en 2018?
Ya tenemos una comisión trabajando en la organización de nuestra celebración de los 50 años (integrada, entre otros, por Cristina Gallardo-Domâs). Esperamos realizar un evento de alto nivel con actividades en más lugares del país, para que sea una celebración a nivel nacional.
¿Cómo destaca Ud. el sello juvenil de esta versión?
Tenemos muchos talentos que van a estar acompañándonos. Además, estoy optimista en que la programación será del gusto de nuestro público, que se amplía cada vez más. El año pasado vimos una mayor participación joven en el evento, que aumentó entre un 15 y 20%. Esto es un tremendo incentivo, pues queremos que una de nuestras funciones sea formar públicos nuevos a través de las clases magistrales y conciertos de extensión, e incorporar a la juventud a través de la misma programación.