Hasta un 50% aumenta demanda por sistemas de seguridad para piscinas

Es la época más demandada para el negocio de las piscinas, pero es en los últimos dos años que los elementos de protección han aumentado en cuanto a requerimientos, surgiendo así nuevos sistemas que cada vez permiten otorgar mejores estándares de seguridad, en especial para los niños.

Para esta temporada, en que el aumento en la demanda ha sido de hasta un 50% respecto del año pasado, lo más requerido hasta ahora son las rejas tipo "peineta" y los nuevos dispositivos de alarma en forma de brazalete.

"Los que más llaman son condominios nuevos y gente joven que está mucho más preocupada de que se hagan buenos trabajos, y no recurrir al 'maestro chasquilla', lo  que puede terminar en rejas muy bajas o puertas que no cierran", indica Marcia Henríquez, una de las dueñas de la constructora Tecnosport, empresa especializada en el rubro. Durante estos meses tiene entre 25 y 30 cotizaciones diarias y el aumento ha sido considerable respecto del año pasado, sobre todo en las rejas "peineta" que ocupan más de la mitad de la demanda.

Estas consisten en estructuras metálicas sólo en forma vertical, sin estructura horizontal superior, lo que permite que no sea escalable. "Esta es una de las rejas más seguras que existen, además que tiene una puerta con seguridad automática con chapa tipo portón", dice la ejecutiva.

Su instalación en una piscina estándar oscila entre 600 y 800 mil pesos. También colocan puertas con cierres magnéticos y cubiertas para piscinas.

En la empresa Ferrobone coinciden en que es la protección más demandada en la actualidad, pero aún continúan construyéndose las tradicionales con perfil horizontal superior. "Estas pueden ser desmontables o fijas y su costo es por metro lineal muy similar a la reja de una casa", explica Muñoz.

BRAZALETE
Uno de los sistemas novedosos para esta temporada es el brazalete "antiahogo" y "antipérdida", un dispositivo en forma de pulsera ideal para niños, que posee un receptor inalámbrico. Si la pulsera se sumerge en el agua, el receptor, que puede estar hasta 50 metros de distancia, comenzará a sonar y vibrar alertando de la situación. También sirve como dispositivo antipérdida, ya que se activa si el niño se aleja.

"Es un dispositivo tan sensible que si el niño lo sumerge en el agua comienza a sonar. Permite, por ejemplo, que una mamá pueda moverse, hacer las cosas dentro de la casa sin estar al lado de la piscina. También puede utilizarse en ancianos y mascotas", explica Juan Pablo Führer, dueño de la empresa Chileniños, uno de los importadores del producto.

Otro equipo es el "vigilante" para piscinas, una alarma que posee dispositivo fijo para la piscina y otro inalámbrico para el interior de la casa (hasta 80 metros). "Comienza a sonar con el movimiento del agua de inmediato. Es muy sensible y efectivo", explica Rodrigo Mayo, gerente de la empresa Aguamarket.