Un helicóptero que transportaba al primer ministro de Haití, Garry Conille, a dos ministros y a un asesor de la Presidencia tuvo que efectuar hoy un aterrizaje de emergencia, sin que ninguno de ellos resultara herido, informó a Efe una fuente oficial.
El suceso se produjo en las montañas de Kenscoff, en los alrededores de Puerto Príncipe, al sudeste, hacia las 17:20 horas locales, cuando los ocupantes se disponían a regresar a la capital tras reunirse con el presidente, Michel Martelly.
En el helicóptero viajaban, junto al primer ministro, el canciller, Laurent Lamothe; el ministro del Interior, Thierry Mayard Paul, y el asesor presidencial Damián Merlo, además del piloto.
"De repente nos cubrió una neblina muy espesa y todo se puso negro", relató Merlo desde Puerto Príncipe, adonde todos ellos regresaron en automóvil tras el suceso.
La aeronave se había elevado unos sesenta metros y tuvo que bajar rápidamente para tomar tierra de nuevo, sin apenas visibilidad y zarandeada por un viento repentino, algo que, según Merlo, es frecuente en esta zona montañosa del país.
En su descenso, el helicóptero estuvo a punto de estrellarse con un árbol, dijo el asesor, quien calificó la situación de "complicada", aunque afortunadamente el suceso no pasó de "un susto".
Al aterrizar el aparato numerosos pobladores de la zona se aproximaron sorprendidos por la presencia en medio de las tranquilas montañas de los miembros del Gobierno, a quienes prestaron ayuda.
La Policía Presidencial llegó poco después y trasladó de nuevo a los viajeros al lugar donde poco antes se habían reunido con el Presidente. Desde allí se organizó el regreso por carretera a la capital haitiana.