La mañana de este miércoles, en la 13ª jornada de juicio oral contra Mauricio Ortega, la hermana de Nabila Rifo entregó su testimonio y relató la escena que presenció cuando fue a buscar a sus sobrinos, la noche de la brutal agresión.
Tras un biombo y sin en el imputado en la sala, Cathy aseguró que la madrugada del 14 de mayo de 2016 fue a buscar a sus sobrinos, ya que estos la llamaron muy asustados, pidiéndole que fuera a la casa.
"Estaba de noche, me fui a pie, corriendo. Al llegar al domicilio, estaba el portón cerrado y sin candado, llego y lo abrí, entré y me quedé un rato en la puerta, escuchando y miraba por la ventana. Vi que estaban como en una fiesta y mi hermana estaba sentada y Mauricio estaba muy alterado", dijo la joven.
Al estar parada en la puerta, Cathy aseguró haber escuchado como Mauricio insultaba a Nabila. "Al golpear la lavadora él, entré y dije: qué pasa aquí. Me quedé parada en la puerta y Mauricio al verme dijo: viste Nadia siempre metí a tu familia. Ahí se paró frente a mí, sólo me miraba y sentí un miedo, no dije nada", indicó.
Tras ello, la hermana de la víctima sintió llorar a sus sobrinos, "subí al segundo piso, estaban desnudos y lloraban. Mi sobrino estaba en la escalera tan asustado que llegaba a temblar y lloraba. Como estaba tan nerviosa se me cayó mi celular y no me di cuenta. Los vestí y bajé, porque no encontraba los zapatos".
"Mi hermana seguía sentada en el sillón, como se seguían insultando, él se le tiraba a mi hermana para pegarle. Juanito lo agarraban de los brazos para que no le pegara. Encontré los zapatos y todo lo que había en la mesa, como habían hecho un asado, estaban los huesos, copas y botellas de vino. Ahí él tiro todo eso y se quebró. Subí rápido, les puse los zapatos", continuó.
Al ver que la situación continuaba muy alterada, Cathy dice haber bajado con los cuatro hijos de su hermana, mientras Juanito y el primo de Mauricio, lo agarraban para que no viera que se llevaba a los niños.
"Me llevé a los cuatro, nos fuimos caminando y llegué como a las seis a mi casa. Mi otra hermana, la Carolina me esperó afuera, ella me ayudó con los niños. (...) La trataba de puta, de maraca y como él estaba tan alterado, estaba agresivo, quería puro tirarse a pegarle a mi hermana", agregó.
Cathy indicó, además, que inicialmente la relación de su hermana con el imputado era buena, pero que después, él no la dejaba salir por los celos. Aquello, según contó, habría ocasionado que Nabila se alejara de su familia, pues antes, iba todos los días a tomar mate a la casa de su madre.