Molesta por el anuncio del cierre del Penal Cordillera, la hija del ex director de la CNI Hugo Salas, Gisela Salas, llegó hasta el recinto a dejar una maleta a su padre para que esté preparado para el cambio, según dijo, "porque es indigno que el cambio sea de un día para otro con la ropa en la mano".
Salas cuestionó las condiciones en las que permanecerán los internos en el centro penitenciario Punta Peuco, pues a su juicio los 10 reos que habitan en Cordillera "no caben" en el establecimiento asignado ya que "están hacinados", dijo la mujer respecto a que el penal ahora tendrá un sobrecupo de seis personas.
"Las piezas son súper chicas, quieren que estén uno encima del otro", manifestó Gisela Salas.
La hija del ex CNI criticó al Presidente Sebastián Piñera y lo calificó como "desleal con la familia militar", asegurando que Piñera los utilizó para su campaña y no respetó el compromiso de "no tocar" a los 10 militares condenados por violaciones a los derechos humanos que permanecen recluidos.
Además, Salas aseguró que el informe emitido por el Poder Judicial donde se revelan las buenas condiciones del recinto Cordillera "no es objetivo", pues insistió que "aquí no hay nadie que tenga privilegios".
Gisela Salas describió el penal Cordillera, cuyas habitaciones al interior de cabañas, desde su punto de vista "es chiquitito", y aseguró que en su pieza el ex CNI sólo "tiene una cama, un televisor y un sillón".
Respecto a las áreas de juego, Salas aseguró que "la cancha (de tenis) es un cementito nada más" y que incluso al ingresar como visita "se nos revisa las maletas, se sacan cosas, se nos pasa a una pieza con detector de metales".