Las hijas de Jaycee Lee Dugard, la joven secuestrada durante 18 años, pensaban que ella era su hermana y nunca se enteraron que fue raptada por su padre a los 11 años, informó hoy un representante de la familia Dugard.

"Jaycee les tuvo que explicar hace unos dos días que había sido secuestrada. Ellas ni siquiera lo sabían", dijo el padrastro de Dugard, Carl Probyn, a la emisora ABC. "Están disgustadas porque es su padre y está en la cárcel".

Dugard y sus dos hijas, de 11 y 15 años, fueron reunidas con su familia la semana pasada y cuentan con ayuda sicológica mientras se adaptan a la realidad.

En 1991, Phillip Garrido secuestró en el estado de California a Dugard, entonces de 11 años, a la cual mantuvo oculta durante 18 años en un jardín detrás de su casa en Antioch, donde también abusó de ella, según la acusación de la fiscalía contra el hombre de 58 años y su esposa Nancy Garrido. El viernes, ambos se declararon inocentes de todos los cargos.

"Es paso a paso, es como estar en Marte", dijo Probyn. "Es una situación totalmente nueva". Adaptarse "va a tomar un largo tiempo", advirtió.

Explicó que las chicas fueron inducidas a creer que Jaycee era su hermana.

"No supieron que ella había estado secuestrada. Pienso que están bien, pero estaban vinculadas a este tipo y lloraron cuando sucedió", dijo Probyn. "Las chicas son inteligentes. Son tímidas y pegajosas, pero listas".