Los hijos de Martin Luther King están en guerra por la herencia de su padre ilustre. El objeto del enfrentamiento son la Biblia que acompañaba siempre al reverendo, sobre la cual juró el presidente Barack Obama y el premio Nobel de la Paz que ganó en 1964. 

Ambos bienes están por el momento en manos de la hija Bernice, quien, inicialmente ha ignorando una orden del tribunal, y se negó a entregarlos para que sean mantenidos bajo custodia oficial.

Ahora parece que la hija aceptó que ambos bienes estén en una caja fuerte, bajo custodia del estado de Georgia, hasta que se resuelva la disputa entre hermanos.

El punto de la discordia es la venta de los preciados objetos. 

Dos hermanos están a favor y la hermana se opone, sosteniendo que son muy preciosos.

Según los hermanos varones, la venta es necesaria para salvar la propiedad de King.