La secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton, urgió hoy al líder libio, Muammar Gaddafi, y a su círculo cercano a tomar la "decisión adecuada y marcharse".
Clinton había deslizado a comienzos de semana, en entrevista con la cadena ABC, que según diversas fuentes, gente cercana a Gaddafi podría estar pidiendo ayuda al exterior para encontrar una salida para el coronel al exilio.
"Hemos estado escuchando muchas cosas de muchas fuentes. Lo que está claro es que él ha perdido la legitimidad para gobernar y la confianza de sus ciudadanos, y eso es la principal razón por la que debe abandonar el poder", indicó hoy Clinton al respecto. "No puede seguir gobernando y rechazando las aspiraciones legítimas de su propio pueblo", agregó.
Durante las últimas semanas, la comunidad internacional ha dado una serie de pasos para presionar a Gaddafi y a su círculo interno, entre sanciones económicas y otras medidas para que tengan que rendir cuentas por sus acciones, a lo que se ha sumado ahora la acción militar, que, recalcó, "añade aún más presión".
Reconoció que hay un gran debate sobre el resultado que generará el fuerte apoyo internacional a la resolución 1973 del Consejo de Seguridad de la ONU, pero subrayó que el propósito del uso de la fuerza no ha sido otra que responder a la crisis humanitaria.
"Hemos comenzado a ver una mejora en diferentes partes del país en cuanto a esta crisis", tras la intervención internacional, aseguró la secretaria de Estado. En cualquier caso, insistió, "dependerá de Gaddafi y de sus leales determinar sus próximos pasos".