La secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, prevé reunirse el jueves en Washington con el depuesto Presidente de Honduras, Manuel Zelaya, adelantó hoy el portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Ian Kelly.
El portavoz explicó que el encuentro, el segundo que se celebraría entre los dos políticos desde el golpe de Estado del pasado 28 de junio y el tercero en total, tiene por objeto "discutir la mejor manera de proceder ante la situación que vive Honduras".
El encuentro se producirá en un momento en que el Departamento de Estado sopesa calificar de "golpe militar" el derrocamiento de Zelaya, aunque el portavoz indicó que todavía no se ha tomado la decisión y que no sabe cuándo se va a producir el anuncio.
Esta calificación tendría implicaciones jurídicas y económicas, pues, según la legislación estadounidense, Washington se vería obligado a cortar formalmente toda la ayuda que entrega a Honduras.
La recomendación que tiene Clinton sobre la mesa es que declare el derrocamiento de Zelaya un "golpe militar", pero EE.UU. ha preferido esperar para dar un margen a los últimos esfuerzos negociadores de la Organización de Estados Americanos (OEA).
La firma de Clinton significaría cortar a Honduras las ayudas de la Millennium Challenge Corporation (MCC), que suscribió en 2005 un convenio de cinco años con Tegucigalpa por 215 millones de dólares en asistencia y que suspendió cualquier actividad en ese país que no estuviera en marcha antes del 28 de junio, según consta en su web.
De acuerdo con esa fuente, hasta la fecha la MCC ha desembolsado 80,3 millones de dólares a Honduras bajo ese convenio.
Los restantes 135 millones de dólares no podrían ser entregados a ese país centroamericano si Clinton decide firmar la determinación técnica y legal de que el 28 de junio pasado tuvo lugar un golpe militar.
Ese día, Zelaya fue detenido por militares y expulsado del país, tras lo cual el Congreso nombró en su lugar a Roberto Micheletti, cuyo Gobierno no reconoce la comunidad internacional.
Kelly indicó que la suspensión de las ayudas no sería automática, sino que en el caso de la MCC tendría que aprobarla el consejo, del que forma parte Clinton.
También para el resto de programas ya congeladas ayudas directas, asistencia militar el Gobierno incluso tendría que informar al Congreso y todo el proceso requeriría coordinación con el Departamento de Defensa.
Zelaya llegó ayer a Washington, en lo que supone su quinta visita a la capital estadounidense desde que fue expulsado de la presidencia de su país.
Hoy tiene previsto reunirse con el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, y participar en una reunión del Consejo Permanente del organismo.
Después, a las 22.00 GMT comparecerá ante los medios de comunicación para evaluar el estado de las negociaciones con el Gobierno de Micheletti y sus conversaciones con Insulza y los representantes de los 33 países miembros activos de la OEA.
En su visita de cuatro días, el destituido mandatario además mantendrá en Washington encuentros con organizaciones de la sociedad civil y de derechos humanos, y defenderá su posición en destacados centros de análisis político.
El portavoz del Departamento de Estado insistió en que Estados Unidos defiende el Acuerdo de San José, propuesto por el presidente costarricense, Óscar Arias, como la mejor solución para la crisis que atraviesa Honduras.
El Acuerdo de San José contempla la creación de un Gobierno de unidad y reconciliación nacional, encabezado por Zelaya, el adelanto de las elecciones, una amnistía para los delitos políticos y una comisión de la verdad y otra de verificación, entre otros aspectos.