Universidad Católica por primera vez en mucho tiempo volverá a recibir un clásico en su estadio, pero la decisión de aprobar y permitir que los cruzados jueguen en su recinto con el condicionante de no contar con público visitante ha generado una cadena de polémicas, que incluyen amenazas, alegatos por discriminación y hasta recursos de amparo en la justicia.

La cronología de los sucesos indica que el 30 de septiembre se realizó la primera inspección al estadio, para el martes 4 de octubre hacer entrega del cuaderno de cargos a la UC.

Tras trabajar los cruzados en el cumplimiento del mismo se citó a una segunda visita, realizada el lunes 10 por las partes involucradas para ver en terreno los avances llevados a cabo por la dirigencia de la franja.

El martes 11 los distintos estamentos vinculados a la aprobación del partido entregaron sus informes a la Intendencia, incluido el trascendental escrito de Carabineros de Chile, indicando que se cumplió en todo lo requerido.

Finalmente el miércoles la Intendencia convocó una "reunión de coordinación del partido" que determinó que el estadio San Carlos de Apoquindo estaba aprobado y que se podrá jugar el partido en la comuna de Las Condes, pero sólo con hinchas locales, medida que causó malestar en el alcalde De la Maza que abogaba por la suspensión del partido.

Esta resistencia encontró nuevos aliados en el líder de la "Garra Blanca" y en los diputados UDI  Gustavo Hasbún y Celso Morales, quienes presentaron recursos de amparo ante la justicia, argumentando discriminación hacia los hinchas de Colo Colo, los que fueron rechazados el viernes.

Ante este escenario, Francisco Muñoz, líder de la "Garra Blanca", aseguró a la prensa que "no hemos amenazado a nadie, pero en vista de que no hubo disposición de Católica para cedernos entradas, asistiremos de cualquier forma", al mismo tiempo que realizó llamados al Presidente de la República y al Ministro del Interior  para que suspendan el cotejo por ser un acto "discriminatorio".

En el transcurso de la tarde de ayer, mediante el Twitter de "Coordinación Garra Blanca", la hinchada que lidera Muñoz sostuvo que "ya tenemos un total de 575 entradas en nuestro poder" las cuales corresponderían a la galería norte.

Además los barristas convocaron a una marcha que pretende juntar a 5.000 personas para desde el sector del metro Tobalaba avanzar hacia San Carlos de Apoquindo.

Las puertas del recinto cordillerano abrirán a las 13.00 y existe un dispositivo de seguridad que contará con la presencia de 800 efectivos policiales trabajando sobre cuatro anillos de seguridad y control, que tendrán como principal misión evitar el ingreso y llegada de hinchas albos.

El pitazo inicial será a las 16.00 y podrás seguir todos los detalles del partido en La Tercera.