En medio de la la inauguración de un curso de carabineros, el ministro del Interior Rodrigo Hinzpeter, argumentó que el Ejecutivo se ve obligado a controlar los desórdenes durante las protestas, en vistas de que "no hay protesta social si es que hay violencia".
El secretario de Estado planteó que, "a veces, uno se enfrenta a una critica de la oposición y de muchos sectores, intentando señalar a que habría una especie de empecinamiento en nuestro gobierno, o en el Ministerio del Interior por perseguir los episodios, quizás pretendiendo que el gobierno los enmarcara en una versión distinta de lo que algunos pueden denominar protesta social".
Asimismo, dijo que, "cuando hay violencia, a mi juicio, simplemente la protesta social se acaba y surgen otras cosas, a lo menos, de protesta vandálica".
El ministro evitó referise al recurso en tribunales por el cual tuvo que presentar la semana pasada la documentación que respaldaría la vinculación entre los atentados incendiarios del sur y la presunta participación de mapuches.