Luego de tres partidos, la selección femenina de Japón se va de Chile con dos certezas: un buen juego mostrado para su próxima meta, el Champions Trophy que se juega desde el 29 de noviembre en Mendoza, y la comprobación del alza del combinado nacional.
Eso es lo que creen al menos en el cuadro nipón, que cerró con derrota 1-0 su viaje por el país. "Juegan bien en los corners, tienen buenos contragolpes y se nota que han mejorado. Ya las vimos en el preolímpico de 2012 en nuestro país y no es sorpresa su juego", analizó su head coach, Yugi Nagai.
El técnico aseguró que el nivel chileno "ha ido en aumento y creo que estamos parejos", aunque por el lado local creen que hay una distancia grande entre las Diablas y las niponas, décimas del mundo (Chile es 20º).
"Ellas vienen con una curva alta de rendimiento y nosotros venimos en renovación. Nos sirven estos partidos para medirnos y ver qué mejorar de aquí a marzo", reconoció el DT chileno, Rony Stein.
Un empate, una derrota y finalmente un triunfo fue el resultado global de las nacionales. "Se aprende mucho de estos partidos, hay mayor atrevimiento a cosas que no se hacen en torneos", dijo la autora del gol nacional ayer, la capitana Camila Caram.
Ahora, Chile buscará nuevo rival para llegar bien al World League de Irlanda, en marzo. ¿El problema? "Estamos buscando rivales. Cuesta traer equipos acá, en parte porque no hay plata", contó Stein. El viaje de Japón fue costeado con las becas Proddar de cada jugadora, "porque el IND no financia partidos de local, sólo giras", agregó el DT. Hay tres opciones: Sudáfrica, Italia o Argentina.
Mientras, la Federación de Hockey reinició con el Mindep las gestiones para una cancha propia. "Manejamos dos opciones, pero tuvimos buena disposición del IND", explicó el director de la Fehoch, Walter Kramer. La idea es tener el recinto listo para el mundial femenino Sub 21 que albergará Chile en noviembre de 2016.