El presidente francés, François Hollande, afirmó hoy que el Estado no aceptará tal cual el plan de supresión de empleos del fabricante de automóviles PSA Peugeot Citroën, en una entrevista televisiva en la que habló del conflicto sirio y pidió a su compañera solucionar en privado a "los asuntos privados", tras su polémico tweet.
Con motivo de la fiesta nacional francesa, el presidente ofreció una entrevista a los canales de televisión TF1 (privado) y France 2 (público) después de asistir al tradicional desfile militar de los Campos Elíseos.
Uno de los puntos más esperados de su intervención era su reacción al anuncio hecho el jueves por el fabricante de automóviles francés PSA Peugeot Citroën, que ante las pérdidas sufridas y las malas perspectivas eliminará 8.000 empleos y cerrará la fábrica de Aulnay, al norte de París.
El presidente dijo que ese plan de reestructuración es "inaceptable tal y como está", por lo que "debe renegociarse".
El gobierno no puede prohibir el cierre de las instalaciones de Aulnay, precisó, pero "podemos hacer que Aulnay siga siendo un sitio industrial". El Estado podrá jugar con "el desempleo parcial", "la formación profesional" y "los créditos que podemos aportar", explicó.
El mandatario se mostró especialmente virulento con la dirección del grupo, a la que acusó de decir "mentiras" y de haber postergado el anuncio para después de la elección presidencial. "Ese plan ya era un rumor hace algunos meses, y la dirección de Peugeot negó que estuviera reflexionando sobre el plan", sostuvo.
Hollande también habló del conflicto en Siria, diciendo que "aún hay tiempo" de encontrar una solución política y evitar una guerra civil, pidiendo a Rusia que deje de bloquear la adopción de una resolución en el Consejo de Seguridad de la ONU.
En cuanto a Mali, donde los grupos islamistas armados controlan el norte del país tras el golpe de Estado del 22 de marzo, Hollande dijo que son los países africanos quienes deben determinar el momento y la magnitud de una posible intervención militar.
Por otro lado, anunció la creación de una "comisión de moralización de la vida política", que será presidida por el ex primer ministro socialista (1997-2002) y mentor suyo Lionel Jospin. "Esta comisión nos hará propuestas para la no acumulación de cargos (...), la financiación de las campañas, los modos de elección", detalló el dirigente.
El presidente también fue interrogado por los periodistas a propósito de su compañera la periodista Valérie Trierweiler, quien desató una fuerte polémica entre las dos vueltas de las elecciones legislativas de junio, al apoyar en su cuenta de Twitter al candidato rival de Ségolène Royal, ex compañera de Hollande y madre de sus cuatro hijos.
En la entrevista de este sábado, Hollande declaró: "los asuntos privados se solucionan en privado. Y se lo he dicho a mis allegados, para que acepten escrupulosamente ese principio".