Mano dura prometió el presidente francés, François Hollande, frente a los disturbios de anoche que se registraron en la localidad de Amiens, donde grupos de alborotadores incendiaron edificios públicos y vehículos y se enfrentaron a los policías, entre los que hubo 16 heridos. El mandatario galo, quien cumple hoy 100 días en el poder, manifestó que se utilizarán todos los medios a su alcance para combatir la violencia.
"El Estado movilizará todos sus medios para combatir esta violencia", aseguró Hollande refiriéndose a esos altercados durante un discurso pública en la Gendarmería de Pierrefeu du Var en homenaje a dos policías asesinados en junio durante una intervención ante un delincuente reincidente. El jefe del Estado francés anunció que su ministro de Interior, Manuel Valls, se desplazaría inmediatamente a Amiens, detalló Efe.
"La seguridad es para los poderes públicos no sólo una prioridad, sino una obligación", señaló Hollande, que adelantó que en el presupuesto de 2013 habrá medios suplementarios para la Policía y la Gendarmería, con la creación de nuevos puestos.
Recordó que se ha designado una quincena de "zonas de seguridad prioritarias" en toda Francia -entre ellas los barrios del norte de Amiens a las que se dedicarán "más medios" y más agentes, y que a la primera lista se añadirán otras.
Según la prefectura, 16 policías resultaron heridos en los desórdenes que se prolongaron durante la noche y la madrugada con un centenar de jóvenes, que incendiaron una escuela, un polideportivo y un centro recreacional, así como muchos vehículos y decenas de papeleras y contenedores que utilizaron como barricadas.
Las fuerzas del orden, que no practicaron detenciones, tuvieron que recurrir a refuerzos de toda la región e incluso de París, recibieron disparos de perdigones y diversos tipos de proyectiles de quienes provocaron los disturbios, ocurridos después de los registrados el domingo tras un control a un automovilista por conducción peligrosa.
En una reacción desde la oposición, el diputado conservador y ex ministro Thierry Mariani, consideró "inadmisible" el ataque a los antidisturbios y dijo que espera del gobierno "una respuesta muy firme".
Hollande, en referencia al asesinato de las dos gendarmes en junio, señaló que "tiene que haber un dispositivo de seguimiento, de control de los individuos más peligrosos", en particular los sometidos a control judicial, pero también cuando han cumplido sus penas.
"¿Cómo entender que un reincidente que ha cumplido su pena no sea objeto de seguimiento?", se preguntó el Presidente.