"No estuve solo en la defensa de los eurobonos", dijo hoy François Hollande, tras las reuniones de madrugada en la cumbre informal de Europa, mientras la prensa del continente destacó los contrapuntos entre el Presidente de Francia y la canciller alemana Angela Merkel y la ausencia de decisiones.
Los jefes de gobierno de la UE coincidieron en abrir una agenda de crecimiento, sin descuidar el control de las cuentas públicas (Pacto Fiscal), pero las herramientas para calentar la timorata economía de la región es el punto de diferencias, sobre todo con Alemania.
En audaz y combativo estreno en la arena europea, el socialista Hollande cumplió con sus promesas electorales y llevó la propuesta de "Proyects Bonds" y Eurobonos al summit. Los primeros, destinados a acelerar obras pública y generar empleo, son bien vistos por Berlín, que rechaza de plano los segundos.
"Hubo diferencias en el intercambio sobre los eurobonos", dijo lacónicamente Merkel luego de la cena que finalizo este jueves en la madrugada.
El jefe del eurogrupo, Jean-Claude Juncker, aclaró hoy, por su hiciera falta, que durante el encuentro no se tomó ninguna decisión sobre los eurobonos.
Holanda, Finlandia y algunos países del euro más pequeños apoyan a Alemania en su oposición a los eurobonos, mientras que naciones como Italia, Eslovaquia, España y otras se muestran favorables, aunque coinciden en que la medida probablemente tardará años en implementarse.
"No nos juntamos para enfrentarnos. Pero tenemos que decir lo que pensamos, cuáles son los instrumentos correctos, los métodos correctos, los pasos correctos, las iniciativas correctas para promover el crecimiento", dijo Hollande.
El primer ministro italiano, Mario Monti, reveló que la mayoría de los estados de la UE apoyaron la postura de Hollande durante la reunión.
La canciller alemana que había logrado imponer su receta de ajuste al resto de la UE aliada con el predecesor conservador de Hollande, el ex Presidente Nicolás Sarkozy, con quien llegó a formar un inflexible y cuestionado tándem apodado por la prensa "Merkozy".
"La relación con Alemania es muy importante, pero no mantengo a otros países a la distancia", aseveró Hollande, diferenciándose de Sarkozy.
Monti insistió hoy desde Roma en el apoyo de su Ejecutivo a la creación de los títulos de deuda conjunta en Europa y contradijo algunas opiniones al sostener que no tardará "muchísimo tiempo" en llegar.
"Italia ve de modo favorable, cuando el momento sea el adecuado -y creemos que esto será dentro de no muchísimo tiempo-, la creación de los eurobonos y cualquier cosa que refuerce la preparación para las inversiones provechosas", dijo el jefe del gobierno italiano.
"Hemos insistido en la importancia para Italia de una política para las inversiones en la UE como instrumento de crecimiento", agregó.
Monti pronosticó una "aceleración" en la Unión Europea en la gestión del posible nacimiento de los eurobonos, pues, tras haberlo abordado ayer en la cumbre informal de líderes europeos en Bruselas, ya no puede "quedar fuera de la mesa".
"Las cosas pueden y deben ser impulsadas e Italia ha reencontrado la credibilidad por lo que los ciudadanos, las fuerzas políticas y el Gobierno han hecho en estos meses para contribuir eficazmente a redefinir las políticas de la UE. Para nosotros de verdad ha comenzado la fase de participación en el 'crece-Europa'", argumentó el líder del gobierno técnico.
