Honduras: Comisiones de Zelaya y Micheletti reanudan el diálogo

Las comisiones del depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, y del mandatario de facto, Roberto Micheletti, reanudan hoy el diálogo para hallar una salida a la crisis política que vive el país centroamericano.

"Esperamos nosotros continuar en una mesa en la cual imperen la prudencia y la armonía, pero sobre todo el respeto a nuestro marco legal y el respeto entre las partes", dijo a los periodistas la ex presidenta de la Corte Suprema de Justicia Vilma Morales, quien es miembro de la comisión de diálogo de Micheletti.

Agregó que la agenda será retomada hoy "en base al Acuerdo de San José", propuesto en julio pasado por el presidente de Costa Rica, Óscar Arias.

Sin precisar detalles sobre la agenda, Morales indicó que los "cinco puntos" en los que se ya se avanzó, que representan un 60% de las negociaciones, "son fundamentales".

El diálogo se celebra a puerta cerrada en un hotel de la capital hondureña, con asistencia de una representación de la Organización de Estados Americanos.

Uno de los dirigentes de la resistencia popular que exige la restitución de Zelaya, Rafael Alegría, dijo que "hay poco optimismo en el diálogo", porque "el régimen golpista de Micheletti sigue reprimiendo al pueblo y no permite la libre circulación de personas".

Añadió que el decreto que restringe garantías constitucionales sigue en vigor, pese a que Micheletti anunció la semana que había sido derogado.

Zelaya anunció la semana pasada que el plazo para que se le restituya en el poder vence el 15 de octubre, aunque no indicó qué medidas adoptará en caso de que el país no vuelva a la normalidad democrática para esa fecha.

Zelaya fue derrocado el 28 de junio pasado por los miliares y enviado a Costa Rica y ese mismo día el Congreso nombró presidente a Micheletti, que hasta entonces era titular del Legislativo.

Después de 86 días en el exilio, Zelaya regresó por sorpresa al país el 21 de septiembre pasado y se refugió en la Embajada de Brasil, donde le acompañan unas 50 personas, entre ellas su esposa, Xiomara Castro.