Estados Unidos afirmó este miércoles que la decisión del Congreso de Honduras de postergar hasta el próximo 2 de diciembre la votación sobre la posible restitución del depuesto presidente, Manuel Zelaya, no contradice el Acuerdo Tegucigalpa-San José.
"El acuerdo nunca estableció un calendario para el pronunciamiento del Congreso" de Honduras, y su decisión del martes de reunirse el 2 de diciembre para debatir sobre la restitución de Zelaya "no necesariamente contradice" el acuerdo, señaló el portavoz del Departamento de Estado, Ian Kelly.
En su rueda de prensa diaria reiteró que Estados Unidos defiende la restitución de Zelaya, quien fue elegido democráticamente, con el fin de que fomentar la reconciliación nacional en Honduras tras el golpe de Estado del pasado 28 de junio.
Según Kelly, eso "implica que (Zelaya) tiene que ser restituido antes de que concluya su mandato" el 27 de enero de 2010, y no antes como exige el depuesto mandatario.
En días recientes, Zelaya se ha quejado del cambio de postura de Estados Unidos, que ha dicho que apoyará las elecciones aún si el depuesto líder no es restituido antes de los comicios del próximo 29 de noviembre.
Pero Kelly insistió en que Zelaya "tiene que ser claramente restituido en un tiempo adecuado" y aseguró que esa posición no ha cambiado.
Agregó que Washington se pronunciará sobre las elecciones hondureñas cuando vea "cómo se gestiona la votación".
En paralelo, al concluir hoy una visita de dos días a Honduras, el subsecretario de Estado adjunto para América Latina, Craig Kelly, dijo que EE.UU. mantiene el "compromiso para seguir trabajando para implementar el acuerdo" y para que se resuelva la crisis política.
Por su parte, el senador Richard Lugar, el republicano de mayor rango en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, elogió este miércoles en un comunicado que el Congreso hondureño haya postergado su decisión sobre si restituir o no a Zelaya hasta después de los comicios.
Lugar dijo que apoya el acuerdo pactado el pasado 30 de octubre y también que Estados Unidos reconozca los resultados si la elección presidencial "reúne las normas internacionales de justicia y transparencia".
Asimismo, expresó que los países de la región, en particular Brasil, deben tomar en cuenta que "el reconocimiento de la elección será la única forma de que Honduras supere la crisis de cinco meses".