El canciller de Honduras, Mario Canahuati, afirmó que su país podría estar regresando a la Organización de Estados Americanos (OEA) en junio próximo, con las gestiones que han iniciado los presidentes de Colombia, Juan Manuel Santos, y de Venezuela, Hugo Chávez.
"Esperamos una resolución y eventualmente retornar a la OEA en junio", indicó Canahuati al referirse a la reunión de los presidentes de Colombia y de Venezuela con el gobernante hondureño Porfirio Lobo, que se celebró el sábado pasado en la ciudad colombiana de Cartagena.
Agregó que la reunión de Cartagena que auspició Santos con Chávez y Lobo le hace sentirse "muy satisfecho".
Hay satisfacción, según Canahuati, porque Lobo "está buscando resolver las diferencias y los problemas que de alguna forma no han permitido que nosotros normalicemos nuestras relaciones con los países de la Unasur (Unión de Naciones Suramericanas) y que al final hayamos tenido problemas para reincorporarnos a la OEA".
Honduras fue suspendida de la OEA una semana después del golpe de Estado al entonces presidente, Manuel Zelaya, el 28 de junio de 2009.
De los países de América del Sur, Argentina, Bolivia, Brasil, Ecuador, Paraguay, Uruguay y Venezuela no reconocen al Gobierno de Porfirio Lobo y exigen el regreso incondicional de Zelaya a Honduras para que este país retorne al seno de la OEA.
El diplomático hondureño no descartó que Lobo también se reúna con presidentes de otros países de la Unasur para normalizar las relaciones con ese bloque de naciones.
Sobre Venezuela, enfatizó que para Honduras es "un paso obligado para ir fortaleciendo sus relaciones con todos los países del mundo", además de que puede contribuir al regreso a la OEA.
Canahuati recordó que Lobo y Chávez también hablaron en Cartagena sobre el alto coste de los combustibles, asistencia agrícola y otros asuntos.
Según el diplomático hondureño, Lobo "está tomando las decisiones correctas", y con la relación que sostiene con Juan Manuel Santos, "logra la credibilidad y confianza" para el acercamiento con Hugo Chávez.
El ex canciller hondureño Ángel Edmundo Orellana comentó que "con la apertura que ha dado el presidente Porfirio Lobo su protagonismo se potencia" y calificó de "muy positivo" el encuentro con Chávez.
Orellana fue canciller y ministro de Defensa de Manuel Zelaya, quien fue derrocado cuando promovía una consulta para reformar la Constitución, aún cuando tenía impedimentos legales.
La reunión entre Santos, Chávez y Lobo ha provocado diversas reacciones, que van desde los que la aplauden y otros que la rechazan, pues consideran que el gobernante hondureño sigue siendo presionado para que Zelaya regrese al país sin someterse a los tribunales por dos juicios que la ha incoado el Ministerio Público.
Lobo ha reiterado su petición al poder judicial para que le anule los dos juicios a Zelaya por presunta corrupción, lo que en su opinión facilitaría el regreso a la OEA y sigue siendo un reclamo de varios países para reconocer a su gobierno, que asumió el 27 de enero de 2010.