Poco más de 15 mil jóvenes entre 15 y 29 años han encontrado trabajo en los últimos dos años. Así lo constatan las cifras del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), que para el mismo período también arrojan un retroceso de la tasa de desocupación juvenil de 16,4% a 14%.
Pero la incorporación de este grupo no ha sido homogénea. Según el organismo, en el trimestre marzo-mayo de este año la actividad económica que más jóvenes empleó como proporción de su dotación total fue hoteles y restaurantes, donde los trabajadores de entre 15 y 29 años representaban 36,2% del sector. Le siguieron las actividades inmobiliarias -intermediación en la compra, venta y alquiler de bienes inmuebles- y comercio al por mayor y menor. Sin embargo, y al medir por cantidad de plazas, este último fue el rubro que más jóvenes contrató.
En el otro extremo, los rubros con menor proporción de jóvenes fueron los hogares privados con servicio doméstico, intermediación financiera y administración pública (ver infografía).
Del total de ocupados en el período (7.613.710 personas), 22%, correspondía a jóvenes.
A juicio del economista de la Universidad de Chile, Joseph Ramos, la relación entre contratación de jóvenes y sectores podría atribuirse a las características de éstos. "Los que tienen más rotación de mano de obra podrían ser más propensos a contratar jóvenes, porque simplemente entran unos y salen otros. Los que buscan a trabajadores permanentes tal vez premian más la experiencia", explica Ramos.
Cecilia Cifuentes, de Libertad y Desarrollo, coincide en que se trata de trabajos que "no requieren tanta capacitación". Por ello considera clave que, a través de instituciones como el Sence, el Estado fomente los programas de aprendizaje en este tramo etáreo.
De todos modos la situación local no es muy distinta a la tendencia global. Si se considera el rango de 15 a 24 años que utilizan los organismos internacionales para medir la desocupación juvenil, Chile está entre el promedio de la OCDE (17,1%) y el que mide la OIT (12,7%). Si en marzo-mayo de 2010 el 19,35% de los jóvenes que buscaban trabajo no lo encontraban, en igual período de este año el 16,4% permanece en esa situación.
"En todo el mundo, salvo Alemania, el desempleo de los jóvenes es más del doble que el promedio. Eso se debe a que este segmento carece de experiencia y contratos", dice Ramos.
Bajo su análisis, el problema se podría combatir implementando un modelo de pasantías en empresas a través de los programas escolares. "Los subsidios y contratos especiales ayudan, pero la piedra de tope es cómo suplir la falta de experiencia", agrega Ramos.
Claudia Sanhueza, de la Universidad Diego Portales, agrega que el salario mínimo "también podría estar afectando mucho más a los jóvenes", privándolos de encontrar empleos. Por ello, Cifuentes añade que sería favorable optar por un sueldo mínimo diferenciado - existe uno de $135 mil para los menores de 18 años-, según la densidad de cotizaciones.