La premiada serie House of Cards está llegando a su fin. El proyecto de Netflix terminará con su sexta temporada, actualmente en etapa de producción.
El drama político protagonizado por Kevin Spacey y Robin Wright emitirá sus últimos 13 episodios en 2018, indicó el medio The Hollywood Reporter. Los productores ejecutivos Melissa James Gibson y Frank Pugliese seguirán en ese rol luego de reemplazar al creador Beau Willimon en la temporada pasada.
La noticia llega en un momento complejo para la serie, sobre todo para el actor Kevin Spacey, quien además ejerce como productor ejecutivo. El artista de 58 años fue acusado por el también actor Anthony Rapp de acoso sexual. A través de una entrevista difundida este domingo por Buzzfeed News, Rapp dijo que Spacey se sobrepasó con el hace unos 30 años, cuando tenía 14 años, después de una fiesta en el departamento de la estrella. "Buscaba seducirme", dijo. "No sé si hubiera utilizado ese lenguaje, pero era consciente de que intentaba llevarme al terreno sexual", explicó.
El ganador del Oscar por la cinta Belleza Americana usó su cuenta de Twitter para disculparse con Rapp de "lo que habría sido un comportamiento borracho profundamente inapropiado". Pero junto a estas disculpas, aprovechó de revelar algo: "Esta historia me ha animado a abordar otras cosas sobre mi vida. Sé que hay historias sobre mí y que algunas han sido alimentadas por el hecho de que he sido tan protector de mi privacidad. Para mí, en mi vida he tenido relaciones tanto con hombres como con mujeres. He amado y tenido encuentros románticos con hombres a lo largo de mi vida, y ahora elijo vivir como un hombre gay. Quiero lidiar con esto honesta y abiertamente y eso comienza con el examen de mi propio comportamiento".
Tras este escándalo, los estudios Media Rights Capital y Netflix difundieron un comunicado conjunto diciendo que están "profundamente preocupados" por las acusaciones. "En respuesta a las revelaciones de anoche, los ejecutivos de ambas compañías llegaron a Baltimore esta tarde para reunirse con nuestro elenco y equipo para garantizar que continúen sintiéndose seguros y apoyados. Como estaba programado previamente, Kevin Spacey no está trabajando en el set en este momento", indicó el escrito difundido este lunes.
El estandarte de Netflix
House of Cards marcó un antes y un después en las producciones del género. El proyecto -adaptación de una serie británica, que a su vez se basó en la novela de Michael Dobbs -, fue disputada por enormes cadenas como HBO, hasta que finalmente quedó en manos del servicio de streaming Netflix en 2011, en una época en que estrellas como Kevin Spacey y cineastas como David Fincher (El curioso caso de Benjamin Button, Red social) recién desembarcaban el streaming.
Con la orden de dos temporadas por unos US$ 100 millones, comenzó el éxito de una producción que terminaría convertida en el buque más emblemático de Netflix, arrastrando elogios y premios como sus 46 nominaciones a los Emmys y 6 galardones a su haber, más un premio Peabody y dos Globos de Oro.
Fue gracias a este éxito que Netflix cambió su manera de invertir en producciones originales, acrecentando su gasto hasta los US $ 6 mil millones al año en más de 30 series.