Huachipato se convirtió en cuartofinalista de la Copa Chile al vencer por 3-2 a Universidad Católica, en un encuentro en el que los locales contaron con la extraordinaria calidad del venezolano Yeferson Soteldo, mientras que los visitantes reiteraron los errores individuales y colectivos que los han convertido en una de las decepciones del semestre.

Los acereros simplemente tuvieron que aprovechar los espacios que dejaba la línea de tres defensores dispuestos por Mario Salas, en la que abundaron las descoordinaciones, principalmente entre Benjamín Vidal y Cristián Álvarez, dificultades que dejaron el campo libre para los veloces contragolpes sureños.

Por si eso fuera poco, cuando la UC alcanzó el empate temporal y parecía controlar el mediocampo, Mario Salas decidió sacar a Carlos Espinosa, dejando a Diego Buonanotte sin su principal asociado, ante el opaco rendimiento de Diego Vallejos.

Con eso, Huachipato vio como se diluía buena parte de la peligrosidad que podían ofrecer los cruzados. A partir de ese momento, hubo tránsito libre para los acereros, quienes metieron con transiciones muy veloces armaron contragolpes que profitaron de la ineficiencia de los zagueros rivales.

Los goles resumieron en buena medida las características del partido: a los 14', Soteldo anotó con un tiro libre tras falta que le cometió Vidal; el 1-1, con una gran combinación de Magnasco, Espinosa y Buonanotte (58'), con resolución del argentino; los dos siguientes fueron de Huachipato, con Soteldo (69'), luego de gran pase de Bernardo Cuesta, y Ortega (81'), con derechazo bajo, después de una asistencia precisa de Valenzuela, tras error de Vidal. El descuento final, anotado por Álvarez (90'+1'), más producto de entusiasmo que de la claridad futbolística.

Gran mérito, además, del técnico metalúrgico. César Vigevani, quien se decidió a poner a Carlos Lampe y Soteldo, quienes apenas tuvieron tiempo de volver de los compromisos eliminatorios de Bolivia y Venezuela, respectivamente.