El sector del transporte público realizó hoy una huelga de tres horas que paralizó a las principales ciudades de Argentina en reclamo de una rebaja en el impuesto a las ganancias y el pago de un adicional salarial para compensar la pérdida de la capacidad adquisitiva a causa de la inflación.
Empleados de aerolíneas, trenes, subterráneos y ómnibus adhirieron a la medida de fuerza que paralizó el transporte a nivel nacional entre las 4:00 y las 7:00 horas, que en algunos casos se prolongó varias horas más hasta que se normalizaron los diferentes servicios.
También adhirió el sector de trabajadores portuarios, lo que afectó la actividad de carga en los principales puertos del país.
El gobierno argentino solicitó hoy "comprensión" a los trabajadores del transporte. "Los principales perjudicados son los trabajadores con estas medidas", señaló el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich.
"No pretendemos generar una polémica, sino que los trabajadores entiendan y comprendan esta situación. El esfuerzo que ha hecho el Estado es significativo, y para garantizar mejor infraestructura y condiciones de transporte, más seguridad vial y mejores condiciones para los trabajadores es necesario tener recursos", señaló Capitanich al justificar el cobro de impuestos.
El influyente sindicato de choferes de camiones, liderado por el jefe de la facción opositora de la central obrera Confederación General del Trabajo (CGT) Hugo Moyano, votó hoy en tanto la realización de una huelga de 24 o 48 horas en las próximas semanas.
"Queríamos un gesto de la presidenta (Cristina Fernández de Kirchner), por lo menos para el mes de diciembre, pero eso no sucedió", argumentó el secretario adjunto del gremio, Pablo Moyano, a radio La Red.
El sector del transporte reclama una rebaja del impuesto a las ganancias, cuyas bases de cálculo no fueron actualizadas pese a la inflación, por lo que el tributo alcanza cada vez a más trabajadores y podría equivaler en diciembre al pago del medio aguinaldo, el decimotercer salario que se paga en Argentina repartido en dos veces, la mitad con el salario de junio y la otra con el del último mes del año.