El presidente peruano Ollanta Humala confía en que el país andino seguirá captando inversión extranjera y en que la economía rebotará a medida que las iniciativas para impulsarla ganen terreno.

Una menor demanda de materias primas de China y la caída en los precios de estos productos han estado moderando la tasa de crecimiento de Perú, que durante gran parte de la última década superó el 6% anual.

El recientemente nombrado ministro de Economía Alonso Segura dijo que la economía del país probablemente de expandirá a un ritmo más pausado, cercano al 4%.

Sin embargo, algunos datos señalan que la desaceleración podría estar quedando atrás.

"La curva nuevamente es ascendente", dijo Humala, hablando sobre cifras recientes que muestran que la economía peruana se expandió en julio, lo que marcaría el inicio de una esperada recuperación desde su peor desaceleración en cinco años.

Ante las críticas surgidas por las dificultadas para la inversión en Perú, Humala dijo que su administración ha implementado medidas para acelerar los procesos burocráticos del gobierno. "Hemos analizado donde están las dificultades", dijo.

La consolidación de la Alianza del Pacífico, un grupo que incluye a México, Colombia y Chile, dará un impulso agregado a las economías de la región, dijo Humala, y contribuirá al crecimiento de las empresas privadas.

Los negocios regionales requieren salir al exterior, dijo en referencia a los mercados internacionales.

"Es una política saludable y positiva promover nuestras compañías, que crean empleo y pagan impuestos", enfatizó.

La economía peruana depende intensamente de la minería, algo que Humala intenta equilibrar con un impulso hacia el desarrollo sostenible. El tema surgió repetidamente durante su discurso en la Asamblea General de Naciones Unidas el jueves.

"La tecnología está haciendo posible combinar el crecimiento económico junto a un desarrollo sostenible y respeto por el medioambiente", dijo en una entrevista en Nueva York, en los márgenes de la asamblea anual de la ONU.

Añadió que su gobierno quiere contribuir a que el país sea menos dependiente de la extracción de recursos naturales, pero que cualquier cambio debe ser progresivo.

"No podemos solamente desconectarnos de un modelo productivo que hemos tenido por casi 200 años", enfatizó.