Human Rights Watch acusó a Israel de cometer crímenes de guerra al atacar a tres escuelas de Naciones Unidas en la Franja de Gaza durante combates en julio y agosto, provocando la muerte de civiles palestinos que se refugiaban en los establecimientos.
El grupo con sede en Nueva York emitió el jueves un informe que describió como la primera documentación en profundidad de los incidentes, que tuvieron lugar durante un conflicto de 50 días entre Israel y militantes palestinos que terminó con un cese al fuego el 26 de agosto.
"Tres ataques israelíes que dañaron escuelas en Gaza que cobijaban a personas desplazadas causaron varias bajas civiles, en violación a las leyes de guerra", declaró la agrupación en un informe basado en entrevistas con testigos e investigación de campo en el enclave dominado por los islamistas de Hamas.
El grupo también dijo que es escéptico sobre la credibilidad de cinco investigaciones criminales anunciadas el miércoles por los militares israelíes sobre las operaciones de guerra en Gaza.
Human Rights Watch dijo que 45 personas, incluyendo a 17 niños, habían muerto dentro o cerca de "escuelas bien demarcadas" en los ataques del 24 de julio en el poblado del Beit Hanoun, al norte de Gaza, del 30 de julio en el campamento de refugiados de Yabalia y del 3 de agosto en Rafah, en el sur del enclave.
Agregó que su inspección del sitio en Beit Hanoun y fotografías de los restos de municiones sugieren que Israel disparó proyectiles de mortero contra la escuela, matando a 13 personas.
Los militares israelíes dijeron en esa ocasión que la escuela había sido alcanzada por impactos errados y que el área cerca de la instalación había sido usada por combatientes palestinos para lanzar cohetes contra Israel.
Human Rights Watch dijo que en el ataque en Yabalia, proyectiles de artillería israelíes mataron a 20 personas en la escuela. Los militares judíos afirmaron que sus tropas habían sido atacadas con morteros por combatientes en las inmediaciones del edificio y que habían disparado de vuelta.
Doce personas murieron en la escuela en Rafah, dijo el grupo, y un cráter de impacto y fragmentos "sugieren enérgicamente" que un avión israelí disparó un misil Spike.
Poco después del incidente, los militares israelíes dijeron que habían atacado a tres combatientes que se desplazaban en motocicleta cerca de la escuela.
El Ejército israelí dijo el miércoles que esperaban obtener testimonios de civiles palestinos con la ayuda de organizaciones internacionales que operan en la Franja de Gaza.
Las investigaciones militares podrían ayudar a Israel a refutar el trabajo de una comisión de investigación del Consejo de Derechos Humanos de la ONU sobre posibles crímenes de guerra cometidos por ambas partes en el conflicto.
Más de 2.100 palestinos, la mayoría de ellos civiles, murieron durante siete semanas de enfrentamientos, según el Ministerio de Salud de Gaza. Sesenta y siete soldados y seis civiles israelíes también perdieron la vida.