La organización Human Rights Watch (HRW) denunció hoy que el Ejército y las fuerzas de seguridad de Siria han detenido de forma arbitraria y torturado a menores de edad desde que comenzaron las protestas contra el Presidente, Bashar al Assad, hace casi un año.

"Las fuerzas de seguridad sirias han matado, detenido y torturado a menores dentro de sus casas, colegios o incluso por la calle. En muchas ocasiones, han ido a por los menores al igual que a por los adultos", explicó en un comunicado Lois Whitman, director de los derechos del menor de esta organización.

HRW ha comprobado que el gobierno utiliza escuelas como centros de detención y puestos de francotiradores, y como barracones militares.

Por lo tanto, la organización reclama en su nota al régimen sirio que deje de desplegar a las fuerzas de seguridad en centros escolares y en hospitales.

Alaa, un joven de 16 años de Homs (centro), la ciudad más castigada por la represión del régimen sirio, dijo a HRW que las fuerzas de seguridad sirias lo detuvieron durante ocho meses, desde mayo de 2011 y hasta enero de 2012 después de haber participado en algunas manifestaciones.

"Me esposaron la mano izquierda desde la que me colgaron en el techo y me dejaron así siete horas, a dos centímetros del suelo. Me tuve que poner de puntillas", aseguró Alaa.

Alaa fue liberado sólo después de que sus padres hubieran sobornado con 25.000 libras sirias (unos 436 dólares), a un escolta de la cárcel donde estaba retenido este joven.

Además, Alaa aseguró estar encarcelado junto con más de 150 jóvenes menores de 18 años.

Según el comunicado, HRW ha entrevistado a más de 100 niños y adultos que han visto a menores encarcelados, detenidos por las fuerzas de seguridad sirias en varias ciudades del país desde que comenzaron las protestas en marzo de 2011.