Aunque en ese instante era imposible preverlo, la polémica salida de Colo Colo significó para Humberto Suazo su última actividad como futbolista profesional. Ayer, en México, hasta donde viajó con la esperanza de conseguir club, el delantero sanantonino decidió poner fin a 16 años de carrera, que comenzaron con su participación en Ñublense, hasta donde llegó enviado por Universidad Católica, club que lo formó, pero que fue incapaz de tolerar los problemas de comportamiento del delantero.
Suazo salió del Cacique, donde alcanzó su mejor rendimiento deportivo en Chile, en octubre pasado. Su partida se produjo por insultos en contra de Pedro Reyes, ayudante del técnico José Luis Sierra, molesto al ser sustituido por Juan Delgado en el partido ante San Marcos, en Arica.
La situación significó su despido por petición de Sierra y hasta hoy se mantiene el conflicto, con el futbolista presentando una demanda por 800 millones de pesos en contra del club.
La información del retiro del goleador fue difundida durante la tarde de ayer por el sitio web mexicano de ESPN.
“Fernando Felicevich, representante del mítico atacante de Rayados, se limitó a confirmar que Suazo se retirará de las canchas sin ahondar en detalles ni atender a más preguntas. La decisión está tomada y por ahora es irrevocable”, afirma la nota publicada por la cadena multinacional.
Durante las últimas semanas, se había especulado con la probable contratación de Chupete en algunos equipos mexicanos y, también, en Liga Deportiva Universitaria de Quito, donde dirige Claudio Borghi, con quien el delantero fue tricampeón chileno y subcampeón de la Copa Sudamericana 2006.
Pese a la cercanía con el entrenador argentino, la posibilidad fue rápidamente descartada por el directivo ecuatoriano Esteban Paz.
En lo inmediato, a Suazo sólo le resta planificar un eventual partido de despedida. En contacto con La Tercera, un cercano afirmó que es probable que dicho encuentro se realice en México y, obviamente, en Monterrey, ciudad que podría convertirse además en su lugar de residencia permanente, como el mismo delantero ha manifestado en más de una ocasión. Chile, por ahora, aparece como una posibilidad distante, tanto para el duelo del adiós como lugar para vivir.