El huracán Matthew dejó casi 900 muertos y decenas de miles de personas sin hogar en Haití antes de dirigirse al norte y avanzar el sábado frente a la costa atlántica de Estados Unidos, con lluvias que causaban severas inundaciones y cortes de energía eléctrica. Carolina del Norte, por otro lado, fue declarado en estado de emergencia.

El gobernador de Carolina del Norte dijo que se reportaron tres personas muertas por el momento en el estado como consecuencia del huracán.

En Haití, el país más pobre del continente donde numerosas comunidades fueron devastadas por Matthew, el número de muertos subió al menos a 877 el viernes, de acuerdo a autoridades locales, que indicaron que áreas remotas quedaron aisladas tras el paso del huracán.

En Georgia, el asistente del forense del condado de Bulloch Richard Pylant dijo que tres personas resultaron muertas allí.

Matthew atravesó el extremo occidental de la península de Haití el martes con vientos máximos sostenidos de 233 kilómetros por hora y lluvias torrenciales. Unas 61.500 personas estaban en refugios, dijeron funcionarios, luego de que el ciclón arrojara las aguas del mar hasta frágiles localidades costeras, algunas de las cuales recién están siendo contactadas ahora.

Al menos tres localidades reportaron decenas de muertos en la zona occidental de Haití, incluyendo Chantal, donde el alcalde informó el fallecimiento de 86 personas, la mayoría por la caída de árboles, y la desaparición de otras 20.

Con las redes de telefonía celular caídas y las carreteras inundadas, la ayuda ha demorado en llegar a las zonas más afectadas de Haití. Los alimentos escaseaban y al menos siete personas murieron de cólera, posiblemente debido a que el agua de la inundación se mezcló con aguas residuales.

El Mesa Verde, un transporte anfibio de la Marina estadounidense, se dirigía hacia Haití para apoyar las tareas de asistencia. El buque tiene helicópteros, excavadoras, vehículos para entrega de agua potable y dos quirófanos.

CUATRO MUERTOS EN FLORIDA

A las 5.00 horas del este de Estados Unidos (6.00 horas Chile), el ojo del huracán Matthew se ubicaba a unos 30 kilómetros al sur-sureste de Hilton Head, Carolina del Sur. La tormenta se movía con dirección norte a unos 19 km/h, con vientos máximos sostenidos de 165 km/h, informó el Centro Nacional de Huracanes.

El CNH reportó ráfagas de viento de 130 kilómetros por hora en Hilton Head y dijo que el huracán podría golpear la costa en la mañana del sábado o durante la tarde.

"Independiente de si el centro del huracán toca o no tierra, los vientos huracanados en el costado norte de la tormenta golpearán la mayor parte de la costa de Carolina del Sur", advirtió el CNH.

Matthew pasó de costado por la costa de Florida con vientos de hasta 195 km/h pero no tocó tierra allí. El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos redujo a 1 la categoría del ciclón en la escala de intensidad de huracanes de cinco fases de Saffir-Simpson. La categoría 5 es la máxima.

En Florida hubo al menos cuatro muertes vinculadas con la tormenta, pero no había reportes inmediatos de daños significativos en ciudades y pueblos en los que Matthew derribó árboles, inundó carreteras y dejó sin energía eléctrica a cerca de un millón de hogares y negocios.

Unos 450.000 hogares estaban sin electricidad en Georgia y Carolina del Sur el sábado, según compañías proveedoras del servicio.

En Florida, dos personas murieron por la caída de árboles y una pareja de ancianos falleció al envenenarse con monóxido de carbono emitido por un generador mientras se refugiaban de la tormenta dentro de un garaje.

Se emitieron advertencias de huracán y de inundaciones repentinas para Georgia y Carolina del Sur y en Carolina del Norte el sábado a primera hora.

Aunque se está debilitando gradualmente, se esperaba que Matthew -que provocó evacuaciones masivas a lo largo de la costa de Estados Unidos- se mantuviera como un huracán hasta que comience a alejarse del sureste estadounidense el domingo, según el Centro Nacional de Huracanes.

El presidente Barack Obama y funcionarios instaron a la población a obedecer las instrucciones de seguridad. Residentes de zonas costeras fueron advertidos de fuertes tormentas que podrían representar riesgos de inundar vencindarios enteros, incluso mientras Matthew se aleja de la región.