El movimiento rebelde yemení de los hutíes ha ordenado que se vuelva a formar la Comisión Suprema de Seguridad y ha confirmado en sus puestos a los ministros de Defensa y del Interior, informó hoy la agencia oficial Saba.

El Comité Supremo Revolucionario -la jefatura de los hutíes- emitió anoche un decreto en el que estipula que los general Mahmud al Sobeihi y Yalal Ruishan sigan en sus funciones de ministros de Defensa e Interior, respectivamente.

El decreto también restablece la Comisión Suprema de Seguridad, la mayor autoridad militar y de seguridad del Yemen, y que ahora contará con nuevos miembros. 

Ese órgano será presidido por Al Sobeihi y estará integrado por diecisiete altos mandos militares y de seguridad, así como dirigentes del movimiento chií de los hutíes.

Entre los miembros designados para esa comisión figura Al Ruishan, el jefe de los servicios secretos, Hamud al Soufi, y el jefe del Departamento de la Seguridad Nacional, Ali Hasan al Ahmedi.

Sin embargo, un responsable gubernamental dijo hoy a Efe que Al Ahmedi rechazó formar parte de ese comité, y presentó la dimisión a su puesto.

Los rebeldes hutíes tomaron ayer el poder mediante una declaración que estipula la disolución del Parlamento y la formación de un Consejo Presidencial en el Yemen para administrar una transición en el país. 

Esta medida busca llenar el vacío de poder dejado por la dimisión hace dos semanas del presidente Abdo Rabu Mansur Hadi y del Gobierno, y se produce después de que los hutíes se hicieran con el control en los últimos meses de siete provincias del país, incluida Saná.

Desde el estallido de la crisis, la ONU ha tratado de mediar entre las distintas fuerzas políticas para tratar de encontrar una salida pacífica al conflicto.

El enviado de la ONU para Yemen, Yamal Benomar, regresó la madrugada de hoy a Saná con el fin de rebajar la tensión, para lo que se reunirá con la jefatura de los hutíes y dirigentes de partidos políticos. 

El Consejo de Seguridad de la ONU analizó la crisis ayer en una reunión a puerta cerrada, a cuyo término expresó su preocupación tras el movimiento de los hutíes y les urgió a cumplir los compromisos pactados anteriormente.

Además, los miembros del máximo órgano de decisión de las Naciones Unidas advirtieron de que están dispuestos a tomar "pasos adicionales si las negociaciones lideradas por la ONU no se retoman inmediatamente".

Con la mediación de Benomar los hutíes alcanzaron estos meses varios acuerdos con Hadi para poner fin al conflicto, pero no cumplieron uno de los principales puntos, que era la retirada de sus milicias de las ciudades bajo su control.