El delantero sueco Zlatan Ibrahimovic ha vuelto a cargar contra el entrenador español Pep Guardiola por el trato que recibió en el Barcelona: "Es un fantástico entrenador. Pero ¿cómo persona? Es un cobarde. No es un hombre", dijo en una entrevista que publicó el semanario alemán Der Spiegel.
Ibrahimovic, actual jugador del París Saint Germain, repasa en la entrevista los motivo de su salida del Barcelona y su polémica relación con Guardiola, de quien dice que "no tiene huevos... Me sacrificó por Lionel Messi y no tuvo el valor de decírmelo".
Según el relato de Ibrahimovic, que deja claro que Messi es un futbolista "brillante", él había conseguido marcar más goles que el argentino, pero éste se quejó a Guardiola y eso supuso un problema, porque "Messi era su estrella".
El sueco recrimina a Guardiola que nunca le explicara por qué lo dejaba en la banca y asegura que no tiene nada contra sus ex compañeros del Barcelona, aunque cuestiona su actitud en el vestuario: "Siempre asentían cuando Guardiola decía algo. Como colegiales delante del maestro".
Ibrahimovic, que había jugado en el Inter a las órdenes de José Mourinho, compara a ambos entrenadores y Guardiola no sale bien parado.
"Mourinho no necesita jugar un papel. El otro quiere ser perfecto. Tiger Woods también quería ser perfecto. ¿Y qué pasó? Pues lo mismo con Guardiola. Todo el mundo tiene un lado oscuro", señala.
Confiesa que "habría dado la vida" por el portugués y elogia su inteligencia y su capacidad de motivar a los jugadores frente al "discurso filosófico" de Guardiola, "una mierda para los avanzados".
Ibra expresa que "Mourinho es capaz de lidiar con las diferentes personalidades y siempre ha asumido retos difíciles, como ahora el Chelsea, mientras que Guardiola los evita".
"¿Por qué ha elegido el Bayern Múnich? Porque es un equipo que funciona también sin él. Era completo. Ha llevado a nuevos jugadores, pero no los necesita", agrega.
Sobre las millonarias sumas que mueve el negocio del fútbol, con el fichaje del galés Gareth Bale como máximo exponente, recuerda que el Real Madrid pagó por él 76 millones de euros. "No valía esa suma. ¿Cien millones por Bale? Tampoco. El sistema está enfermo. Los contratos que firmamos son una locura. Ningún jugador vale ese dinero", afirma.