Una grabación no autorizada. Así definió ICARE lo ocurrido con el ex intendente de la Araucanía Francisco Huenchumilla en la polémica que estalló este miércoles: un video en el que el dirigente, pensando que no estaba siendo grabado, planteaba puntos controversiales con respecto a su posición ante el conflicto en su región.

En una declaración pública de siete puntos, la organización indica que el encuentro estaba siendo registrado para que quedara luego a disposición on demand en su sitio.

"En esta ocasión, a petición del invitado, se acordó interrumpir la grabación, lo cual fue comunicado al equipo de Mediastream, proveedor externo del servicio audiovisual, disponiéndose el retiro del camarógrafo del salón", indica la declaración.

"No obstante lo anterior, por impedimentos físicos en la sala no pudo ser retirada la cámara robótica que es monitoreada por el proveedor desde una mesa de control ubicada fuera del salón, realizándose desde allí la grabación no autorizada", plantea ICARE.

"ICARE y los participantes del encuentro no tenían conocimiento de que se continuó grabando ni de la existencia de este material hasta el día de hoy", se señala, asegurando que la institución "ha solicitado a su asesoría legal estudiar las implicancias legales derivadas de esta situación".