Recién en septiembre Ignacio Casale verá actividad tras su título de quads del Dakar de este año, cuando el piloto compita en el Desafío Inca de Perú. Hay dos razones para la larga espera. Una es su moto: "La mandamos a arreglar a Colombia y debería llegar en septiembre", explica a La Tercera.

¿Y la otra?

Preferí guardarme para las carreras importantes, como el Inca, que correré con la moto nueva. La otra carrera en que estaré será el Latinoamericano y de ahí, a pensar en el Dakar.

¿Cómo ha sido el proceso de entrenamiento para defender el título de quads?

Muy fuerte, entrenando mucho. Ha sido duro el trabajo para volver a ganar el Dakar. Llevo cinco Dakar seguidos terminados y espero seguir ganando.

¿Cambia la expectativa tras el campeonato?

Claro, porque ahora soy el piloto al que todos quieren ganarle. La presión ahora es más alta y afecta en todo sentido.

¿En qué sentido afecta? ¿Hay miedo?

No, nunca miedo, pero sí respeto a los rivales. Me tengo fe, soy rápido y creo que será un buen Dakar. Tengo una tincada.

¿Qué cosas ha cambiado con respecto al último Dakar?

Ando más fuerte que antes y, además de trabajar con los problemas de la moto en el agarre, me mejoré de los tendones. Después del Dakar quedé con problemas en los tendones de mis manos y tuve que hacer sesiones de rehabilitación. Me sigue doliendo, pero mucho menos que antes.

Asumo que, tras el título, es obligatorio ser campeón en 2015.

No puedo salir quinto, por ejemplo. Es por un tema mío. En mi cabeza está ganar. Ser segundo es muy bueno también, pero me concentro sólo en ganar.

Y eventualmente pensar en un cambio a los autos...

Sí, pero lo de los autos será en un par de años más, yo creo. Corrí el Dakar en camiones, en motos, en quads y faltan los autos, pero me queda un buen rato en los quads.

¿De qué depende un potencial cambio a los autos?

Por ejemplo, que sea con un equipo oficial de autos. Cualquier marca, pero me gustaría que sea de forma oficial, porque quiero estar entre los mejores. Incluso, una vez estuve en una reunión junto al director del Dakar, Etienne Lavigne, y me dijo que había equipos de Europa que me estaban siguiendo, que había rumores de eso. Pero los frené. Como te dije, me queda rato.

¿Cómo evalúa la decisión de mantener el Dakar en Chile tras las dudas por el terremoto de Iquique?

Estoy feliz por eso, por tener el Dakar en Chile. Somos muchos que estamos felices con la decisión del gobierno. Además, esto ayuda mucho para los habitantes de la zona, les sube el ánimo. Si el Dakar es como el Mundial de fútbol, pero para los motores y que estemos en él es positivo para el país.