El presidente de la Democracia Cristiana, Ignacio Walker, resaltó hoy los alcaldes obtenidos por la colectividad, entre ellos, Alvaro Ortiz (Concepción), Christian Vittori (Maipú), Carmen Gloria Fernández, (Quinta Normal),Felipe Delpin (La Granja), Carola Leitao (Peñalolén), Raúl Donckaster (La Reina), Carlos Adasme (Isla de Maipo) y Javier Muñoz (Curicó).
En este contexto, el timonel y senador DC afirmó que la primera tarea de los ediles DC elector será "cumplir la palabra empeñada a los ciudadanos"
Walker enfatizó que la DC aumentó a 15,11 su porcentaje de votos y creció de 59 a 68 Alcaldes y desde 344 a 385 Concejales en todo el país, ante lo cual planteó que "la DC se propuso subir un escalón, pero las cifras nos muestran que eso lo superamos con creces. La gente nos eligió porque nosotros volvimos a creer en la gente, con procesos abiertos y participativos para definir a los mejores candidatos en todo Chile".
"Por personas gobernadas por la DC, hemos pasado a ser la primera fuerza política nacional: 3.093.179 chilenos y chilenas tendrán un alcalde DC con el 18,65% de la población, seguido en segundo lugar por la UDI, con 17,33%. Este resultado es, indesmentiblemente, parte de la victoria de la oposición sobre el gobierno. El año 2008 teníamos 9 alcaldes más. Hoy la Concertación tiene 47 alcaldes más que la Alianza"; resaltó.
Asmismo, agregó que "el aumento no es producto del azar sino del buen trabajo realizado por todo el partido sin excepción. Nuestro lema en esta campaña fue 'la Democracia Cristiana une a Chile', y esa ha sido una realidad puertas afuera y puertas adentro. Hemos sido creíbles y coherentes y eso ha sido premiado por los ciudadanos".
Walker destacó que su partido "apostó al reemplazo generacional y de figuras. Cerca de un 30 por ciento de nuestros candidatos a alcalde –donde ya dirigíamos el municipio- han sido líderes de recambio. Nos renovamos más, apostamos más y nos fue bien".
Respecto a la alta abstención en las elecciones municipales, Walker sostuvo que si bien es una señal de alerta hacia los dirigentes políticos, "tampoco tengo una visión catastrofista. La experiencia internacional lo demuestra: en todos los países en que se aplica voto voluntario, la abstención bordea el 40 a 50%. Claro, es una alerta, pero a la vez un gran desafío porque los problemas de representación se resuelven con más y mejor democracia".