Un equipo internacional de cirujanos implantó en Estados Unidos una tráquea-arteria, realizada a partir de células madre, a una pequeña surcoreana de dos años, por primera vez en el mundo en el caso de niños.  

La pequeña niña nació sin tráquea y los médicos pudieron "fabricar" un órgano de repuesto utilizando células madres extraídas de su médula ósea y rápidamente cultivadas en un tubo especial de plástico. 

Las células se multiplicaron rápidamente en el laboratorio formando una nueva tráquea en menos de una semana.

La niña, que se llama Hannah, nació en 2010 en Corea del Sur de padre canadiense y madre surcoreana. Desde entonces pasó toda su vida en un hospital de Seúl puesto que no podía respirar, comer, beber o tragar. Los médicos no le daban ninguna esperanza de sobrevivir.

Hannah fue operada el 9 de abril en el hospital de niños de Peoria, en Illinois y el éxito de la operación fue revelado el miércoles.

La operación para trasplantar la tráquea, de 7,62 centímetros de largo, duró nueve horas.

Los primeros signos indican que la tráquea funciona normalmente, afirman los médicos que piensan que la niña podría volver a su casa y llevar una vida normal. 

"Lo más sorprendente de este milagro (...) es que este trasplante no solamente le ha salvado la vida sino que le permitirá finalmente comer, beber, tragar e incluso hablar como cualquier niño normal", declaró Paolo Macchiarini, profesor de cirugía regenerativa del Instituto Karolinska de Estocolmo, Suecia, y jefe del equipo de cirugía de esta operación.