Gracias a una inversión de $354 millones, el Hospital Clínico de la Universidad de Chile contará con Sistemas de Colectores Solares para agua caliente Sanitaria, convirtiéndose en el primer hospital chileno con esta tecnología.
La iniciativa beneficiará a más de 43 mil pacientes al año y producirá un ahorro de más de 50 millones anuales en agua caliente.
El ministro de Energía, Rodrigo Álvarez, espera que iniciativas como éstas, desarrolladas por la División de Acceso y Equidad Energética (DAEE), se repliquen en otros recintos de salud a lo largo del país.
"El Presidente de la República nos ha encargado diversificar la matriz energética de Chile y ésta es una excelente iniciativa que forma parte del plan del Ministerio de Energía para fomentar las Energías Renovables No Convencionales", dijo.
El sistema será instalado en la azotea del recinto, abarcando 800 m2 de área colectora total, tras lo cual aportará más del 60% de la energía anual necesaria para producción de agua caliente sanitaria y de vapor del hospital.
"Con este proyecto se disminuirá el consumo de 108 mil litros de petróleo al año, que se traducen en 270 toneladas de CO2 que se dejan de emitir a la atmósfera", dijo Alvarez, destacando que se trata de una "energía limpia, cuya tecnología es amigable con el medio ambiente".
La iniciativa, además de ser una solución que apunta directamente a la generación de ahorro y disminución de emisiones de gases efecto invernadero del hospital, pretende convertirse en una instalación para ser aprovechada para fines académicos y de investigación para las facultades de la Universidad de Chile u otra universidad, que desarrollen conocimientos de energía solar térmica.