Las importaciones chinas de cobre refinado cayeron 35,6% en febrero desde el mes previo a un mínimo en 27 meses por el efecto de las fiestas en el mes más corto del año y por las existencias altas.

El principal consumidor mundial de cobre celebró las fiestas del año nuevo chino, lo que llevó a muchos fabricantes y operadores a cerrar sus operaciones por una a tres semanas en febrero.

"Dos razones principales por la fuerte caída: las fiestas y el arbitraje pobre", dijo un analista de Jinrui Futures, y agregó que muchos operadores habían extendido las fiestas de una semana ante la caída de la demanda de los fabricantes.

Las importaciones cayeron a 158.185 toneladas en febrero, un mínimo desde noviembre de 2008 y en baja desde 245.617 toneladas en enero de 2011, según datos de la Administración General de Aduanas publicados el lunes.

El ingreso bajó 28,2% desde el mismo mes del año previo. En los primeros dos meses de 2011, las importaciones cayeron 3,3% desde hace un año a 403.802 toneladas.

El analista dijo que los precios chinos del cobre se mantuvieron por debajo del costo de las importaciones, por lo que los operadores redujeron sus importaciones al contado y colocaron los arribos ya contratados en depósitos fiscales.

Las existencias fiscales de cobre, o las que fueron recibidas pero no pagaron el impuesto local al valor agregado de 17%, se estiman por encima de 600.000 toneladas actuales contra cerca de 250.000 a 300.000 toneladas a principios de diciembre.

Las importaciones de cobre refinado podrían subir en marzo desde febrero, ya que sube la demanda de los fabricantes, dijo el analista.