Los aumentos tributarios del presidente Enrique Peña Nieto sobre la frontera mexicana están frenando las ventas en Grupo Posadas SAB de CV, que maneja hoteles de lujo sobre la playa en Los Cabos y Cancún. También están dejando pérdidas a los acreedores.

Los pagarés de Posadas por US$310 millones con vencimiento en 2017 perdieron 3% desde que la empresa dijo el 28 de julio que los ingresos cayeron 29% en el último año en tanto los impuestos al valor agregado desalientan a los turistas. La caída de los bonos es tres veces mayor que la caída media en América Latina.

La cadena hotelera más grande de México, que ofrece habitaciones con un costo superior a US$3.000 la noche, está viéndose afectada por el esfuerzo de Peña Nieto para que su país reduzca su dependencia de los ingresos petroleros. Como parte de cambios tributarios generales el año pasado, en enero México elevó la tasa del IVA en las regiones fronterizas con los Estados Unidos y algunos estados costeros. Esto llevó a una caída de las ventas en un momento en que la economía forcejea con su crecimiento más flojo desde 2009.

"El principal impacto que está teniendo la reforma tributaria se da en las ventas y tiene que ver con dos cosas: el menor poder adquisitivo del consumidor mexicano y el IVA más alto en las regiones fronterizas, que afecta a los hoteles de la costa", dijo Sandra Beltrán, analista de Moody's Investors Service en Ciudad de México.

En un comunicado reenviado por una compañía externa de relaciones públicas, la empresa dijo que "confiamos en que el Ebitda que esperamos registrar en diciembre mejore el apalancamiento de la empresa. Continuaremos analizando distintas opciones para financiar el vencimiento de deuda programado para enero de 2015, entre las que se cuentan las preferencias bancarias o el factoraje, por mencionar sólo algunas".

SALTOS DE APALANCAMIENTO

El 1 de enero, el impuesto sobre las ventas subió desde 11% hasta 16% en estados como Quintana Roo, donde está situada la ciudad de veraneo de Cancún y Baja California Sur, donde se encuentra Los Cabos. Esto lo alineó con el resto del país.

Los cambios legislativos de Peña Nieto también modificaron la forma en que las empresas calculan los impuestos. Los pagos impositivos de Posadas crecieron 12 veces, hasta 433 millones de pesos (US$32,5 millones), en el primer semestre respecto del mismo período un año antes. Esto hizo subir su deuda neta hasta 6,2 veces las ganancias antes de interés, impuestos, depreciación y amortización en el segundo trimestre desde 4,2 veces a fines de marzo.

La empresa, controlada por la familia Azcárraga Andrade, dijo el 25 de julio que su efectivo y otros activos líquidos cayeron 46% en tres meses hasta US$57 millones al final del segundo trimestre debido a un pago de intereses por US$12 millones, al gasto de capital y a "nuevos impuestos dentro del contexto de la reforma fiscal de México".

Los rendimientos sobre los bonos de Posadas aumentaron 1,67 puntos porcentuales, hasta 8,17%, desde que la empresa anunció ganancias, muestran datos recopilados por Bloomberg.

"Agotaron mucho efectivo que debió destinarse a impuestos", dijo por teléfono desde Nueva York Jacob Steinfeld, analista de JPMorgan Chase Co., que rebajó los bonos de Posadas de una posición neutra a subponderada la semana pasada. "Su apalancamiento debería mejorar, pero todavía sigue siendo demasiado elevado".