Al menos 61 personas resultaron heridas hoy y unas 4.500 tuvieron que ser evacuadas tras producirse un incendio en un túnel del metro de Moscú en la hora punta de la mañana, informaron las autoridades de Defensa Civil.

Las llamas fueron causadas por un cortocircuito en los cables de alta tensión y obligaron al cierre de varias estaciones del metro, considerado como uno de los más utilizados del mundo (con nueve millones de pasajeros diarios) y principal vía de transporte de Moscú.

Los heridos recibieron tratamiento por inhalación de humo y tres mujeres fueron hospitalizadas en la unidad de cuidados intensivos. La televisión mostró a los ciudadanos saliendo de los túneles, algunos con pañuelos mojados cubriéndose el rostro para poder respirar.

El incendio se produjo a las 8:30 horas (04:30 GMT) en un túnel entre las estaciones de Ojotni Riad y Biblioteka Imeni Lenina (Biblioteca Lenin), en el centro de la capital, cerca del Kremlin.

El fuego fue apagado menos de una hora después. El alcalde de la capital rusa, Serguei Sobyanin, anunció que habrá una completa investigación.

La paralización de la línea causó numerosos problemas en la red de transporte y en el propio metro. Los trenes volvieron a circular a las 12:30 horas, cuatro horas después del incidente.

El tren subterráneo, inaugurado en 1935, es famoso por su decoración con columnas de mármol, candelabros y mosaicos inspirados en los palacios de los zares, aunque los expertos coinciden en que necesita renovación técnica. Las estaciones llevan los nombres de líderes revolucionarios como Lenin, poetas como Pushkin o "ciudades heroicas" como la antigua Stalingrado.

Durante la Segunda Guerra Mundial los túneles se usaron como búnkers para la población civil. Los trenes recorren un total de 300 kilómetros a un intervalo de 45 segundos en las horas pico.