Independiente vive una de las etapas más negras de su fútbol. En 108 años de historia, los de Avellaneda cayeron a la B argentina luego de perder por 1-0 ante San Lorenzo en el estadio Libertadores de América.
Era un partido clave para los rojos. Necesitaban ganar a toda costa para evitar el primer descenso de su historia, y lo demostraron con gran poder ofensivo en los primeros minutos de partido en los pies de Montenegro, quien dominó el balón y armó jugadas de ataque desde el mediocampo local. Sin embargo, a los rojos no les bastó con esto, y a pesar de que Romagnoli generó peligro de gol, no pudieron finiquitar. Más tarde, los de Avellaneda se vieron opacados por San Lorenzo.
La desesperación de la hinchada de Independiente se sintió en la cancha pues, antes del primer tiempo, protagonizó incidentes que obligaron al juez del encuentro a detener el juego. Asimismo, la presión del "ciclón" se hizo presente y a los 60 minutos Ángel Correa definió a un costado de la portería del meta Rodríguez, sentenciando la caída de los rojos a la segunda categoría del fútbol argentino.
Pero Independiente no sólo dependía de su propio resultado en la penúltima fecha de la fase regular, pues para salvarse del descenso, requería que San Martín no sumara más de dos puntos y que Argentinos Juniors no sumara unidades. Pero ninguna predicción resultó, ya que los sanjuaninos ganaron 2-0 a Estudiantes de La Plata y Argentinos Juniors triunfaron por la misma cuenta ante Colón de Santa Fe, permitiendo que ambas escuadras victoriosas acumularan tres puntos más.
Luego de esta jornada y a falta de una fecha para el término del Torneo de Clausura argentino, Independiente desciende automáticamente. Los rojos, ganadores de siete ediciones de la Copa Libertadores de América, desde la próxima temporada participarán en el Nacional B y la próxima semana deberán medirse ante Colón de Santa Fe para cerrar la última fecha del campeonato.