INE estima cifra vigente de población a 2011 a la espera del Censo: 17.248.450

<p class="bullet">Estadísticas Vitales 2011 actualiza el número de chilenos con datos de nacimientos y defunciones, sobre base del Censo 2002.</p> <p class="bullet">En espera de los resultados del Censo 2012, es la cifra vigente que puede ser usada en políticas públicas.</p>




* 17.248.450 CHILENOS

Esa es la cifra de población estimada para el país que arrojan las últimas Estadísticas Vitales 2011, y que a falta de datos del Censo 2012, será la cifra vigente que debería usarse para determinar una serie de políticas públicas.

La cifra se calculó usando como base el Censo 2002, ya que los resultados del Censo 2012 quedaron pendientes hasta la revisión de la comisión de expertos. Eso sí, el informe del INE incorpora datos actualizados de nacimientos y defunciones que entregan otras reparticiones del Estado, como Registro Civil y Ministerio de Salud.

A diferencia del censo, las Estadísticas Vitales no incluyen el número de inmigrantes, lo que distorsiona el dato de cuántas personas viven efectivamente en Chile, pero el INE está buscado la forma de solucionar este problema (ver recuadro). Tampoco entrega una cifra de población desagregada por comuna. Sin embargo, sí proporciona una estimación de población general y su caracterización por género, edad y concentración por región, lo que unido a datos de nacimientos, defunciones, matrimonios y principales causas de muerte, sirven de base para la toma de decisiones en áreas como salud, trabajo y seguridad social, vivienda, hacienda, defensa, justicia, seguros privados y otras.

* 69% DE LOS NIÑOS ES DE MUJERES SOLTERAS

Según las Estadísticas Vitales 2011, ese año se registraron 247.358 niños nacidos vivos en el país, lo entrega una tasa bruta de natalidad de 14,4 niños por cada mil habitantes y una tasa de fecundidad de 1,89. Lo anterior reafirma un dato ya sabido: las mujeres chilenas están teniendo menos de dos hijos, la base para que haya un recambio generacional.

Del total de nacimientos, el 61,4% se concentra en tres regiones: Región Metropolitana, Biobío y Valparaíso. Y el 30,7% corresponde a mujeres casadas y 69,2% a solteras. Lo que muestra que la tendencias de hijos nacidos fuera del matrimonio sigue en alza.

¿Para qué políticas públicas sirven estos datos del INE? Según un informe del INE las estadísticas de nacimientos permiten determinar el número de recién nacidos y lactantes que deberán ser atendidos en cada región y en cada comuna del país, para fines de control de su estado de salud, de alimentación complementaria, de inmunizaciones, etc. Y en educación permiten proyectar el tamaño y la composición de las generaciones de lactantes, preescolares, escolares y demás grupos que demandarán servicios educacionales cada año.

* Hay 61 MAYORES DE 65 AÑOS POR CADA 100 MENORES DE 15

De los más de 17 millones de chilenos que estiman las Estadísitcas Vitales 2011, hay 61 mayores de 65 años en Chile por cada 100 menores de 15 años. Esa cifra muestra el estado de la vejez del país y cómo este índice ha ido creciendo: en 2005 eran 46,1 mayores de 65 años por cada 100 menores de 15.

Lo mismo se ve a la inversa: si en 2011 un 22,2% de la población nacional tenía menos de 15 años, en 2000 era un 28,4%.

María Teresa Abusleme, encargada de la Unidad de Estudios de Senama, explica que las cifras de Estadísticas Vitales se usan permanentemente, como un insumo clave para diseñar políticas públicas que tengan correlato con lo que sucede en la realidad. "Son las cifras que nos hablan de que Chile es un país envejecido". De hecho, es lo que permite proyectar que al 2025, habrán 111 personas mayores por cada 100 niños menores de 15 años. Es decir, que habrá más adultos mayores que niños.

* TASA DE MORTALIDAD: 5,5 POR CADA MIL HABITANTES

Es la cifra que permite establecer prioridades de intervención preventiva sobre la población y sobre cada grupo, explica la experta del INE.

También entrega la magnitud de la mortalidad y de su composición por sexo, por grupos de edad, por causas de muerte, por área geográfica y por variables económico sociales, como el nivel de educación y la ocupación, los que constituyen mecanismos de evaluación permanente de la actividad preventiva y curativa del sector salud. En este sentido son fuente de diversos indicadores de la Estrategia Nacional de Salud al 2020. "Las compañías de seguros de toda índole, las isapre y las AFP, son grandes usuarias de las Estadísticas Vitales, dado que aplican métodos derivados del cálculo demográfico para las estimaciones de sobrevida de sus afiliados", según explican en el INE.

La mortalidad según tipo de enfermedad se ha mantenido relativamente estable. Para este último registro, las enfermedad del sistema circulatorio siguen siendo la principal causa de muerte (27,1%). Los tumores malignos continúan siendo la segunda causa y, como era de esperar, están al alza: si en 2000, el 23,2% de las muertes fueron por esta razón, en 2011 aumentaron al 24.9%.

Marinella Mazzei, demógrafa del Programa de Epidemiología de la Escuela de Salud Pública de la U. de Chile, explicó que esta información es de gran utilidad, sobre todo para la planificación en salud y epidemiología. "Saber de qué se muere la gente, a qué edad, sirve para hacer planes de prevención o para afinar programas sanitarios, porque el perfil de natalidad y mortalidad van cambiando. Con estos datos también se extrae la esperanza de vida al nacer de un país. La cifra de nacimientos, en tanto, sirve para medir la tasa de cobertura de la vacunación", dice.

* 64.768 MATRIMONIOS; SIGUEN EN ALZA

En el año 2011 se registraron 64.768 matrimonios en Chile. Eso entrega una tasa de nupcialidad de 3,8 enlaces por cada mil habitantes, lo que revela que los matrimonios siguen, por segundo año consecutivo, al alza: en 2010 la tasa era de 3,5 y en 2009 de 3,3. Esto en un contexto donde las cifras de matrimonio registraron un importante descenso desde 2000 (cuando la tasa era 4,3).

La edad media en que los chilenos contraen su primer matrimonio es a los 31,5 años en las mujeres y 30,2 años en los hombres. Una cifra que sigue en aumento: en 2000 la edad media en que las mujeres se casaban era 26 años y 29 los hombres. Conocer estos datos sirve para establecer políticas de vivienda, por ejemplo, ya que se sabe cuántas parejas nuevas se han formado y podrían solicitar un hogar nuevo.

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