La Sexta Encuesta Nacional de la Juventud, elaborada por el Instituto Nacional de la Juventud (Injuv) arrojó que el 50,6% de los jóvenes, tienen deudas impagas o por pagar siendo las mujeres y la juventud de sectores socioeconómicos medios, quienes tienen un mayor nivel de endeudamiento.

La gran mayoría de las deudas de la juventud están asociadas al consumo. El 57,3% tiene deudas con casas comerciales y un 33,7% declara estar endeudado con tarjetas de crédito. Sólo un 16,1% tiene deudas relacionadas con educación y 3,5% con créditos hipotecarios.

Asimismo, un importante porcentaje (29,2%) de los jóvenes que han contraído deudas se encuentra en mora, es decir, está atrasado en los pagos. De este número el 32,5% adeuda en casas comerciales.

"El 46,8% de los jóvenes dice vivir exclusivamente de los ingresos aportados por otra persona, que son principalmente los padres. Muchas veces la realidad del endeudamiento es algo que no se conversa en las familias y los jóvenes contraen deudas sin tener capacidad de pago o un buen manejo de sus finanzas, llegando incluso a ser un tema desconocido por el núcleo familiar", indicó Ignacio Naudon, el director del Instituto Nacional de la Juventud.

Naudon agregó que el 46,6% de los jóvenes dice que tiene acceso a tarjetas de crédito de casas comerciales.

Por su parte, el director del Servicio Nacional del Consumidor (Sernac), Juan Antonio Peribonio, señaló que un crédito puede ser una buena herramienta para quienes no pueden acceder a productos o servicios al contado, pero debe ser usado con responsabilidad. "El endeudamiento no es problema hasta que se transforma en sobreendeudamiento", explica.

Peribono apuntó la importancia de que los jóvenes conozcan sus derechos y se atrevan a ejercerlos pues la encuesta CERC indica que más de la mitad de los jóvenes (51%) entre 18 y 25 años no los conoce y el 47,3% se siente poco protegido en materia de consumo, superando a todos los niveles etareos.

RECOMENDACIONES
Antes de tomar un crédito, pregúntate si realmente lo necesitas y si el presupuesto familiar puede asumir una deuda más.

No dejarse llevar sólo por ofertas publicitarias, pues ningún crédito es gratis.

No dejarse tentar sin antes comparar otras alternativas de crédito.

Fijarse en la cuenta, no sólo en la cuota del crédito.

Fijarse no sólo en la tasa de interés, pues el costo final del crédito está formado por comisiones y otros costos asociados.

No confiar en el pago mínimo todos los meses pues puede significar una deuda vitalicia que arrastrarás por toda la vida.

Es mejor pagar todas las compras con una tarjeta que con tres y es recomendable concentrar todas las compras en una sola transacción y evitar así el cobro de comisiones.