El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, dijo que considera que la destitución de la diputada opositora María Corina Machado no es lo mejor para el diálogo que se busca emprender en Venezuela.
"No entiendo por qué se le ha perseguido y se le ha querido despojar de su carácter de parlamentaria. Pero esa es mi opinión, yo respeto lo que dice el Tribunal Supremo de Venezuela. Simplemente creo que para el diálogo que se quiere emprender eso no es la mejor salida", dijo Insulza sobre Machado durante una cumbre a la que asiste en la ciudad colombiana de Medellín.
Y "no entendí por qué se le impidió hablar" en la OEA, donde aunque no hay una norma que establezca que una persona pueda tomar la silla de un país para plantear sus asuntos sí hay una tradición de que eso ocurra, explicó el responsable.
El martes pasado la fuerza pública impidió el ingreso de Machado al Parlamento venezolano luego de que el Tribunal Supremo de Justicia ratificara su destitución, alegando que la política "perdió su investidura" por haber acudido el 21 de marzo a una reunión de la OEA como "representante alterna" del gobierno de Panamá, en una cita de la que finalmente fue excluida su intervención.
La ahora exdiputada y el líder del partido Voluntad Popular Leopoldo López, preso en una cárcel militar desde hace más de un mes acusado de instigar a la violencia, promueven "La Salida", una estrategia para forzar la renuncia de Maduro con protestas callejeras.
Maduro lanzó a fines de febrero un diálogo nacional con distintos sectores en el que participaron jerarcas de algunos cultos religiosos y empresarios en busca de soluciones para la crisis que vive el país, pero la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) ha rechazado acudir a esas citas.
La mediación de Unasur, que envió la semana pasada una comisión de cancilleres a dialogar con distintos sectores a petición de Maduro, o de la iglesia católica también se han considerado en Venezuela.