Si bien en 2010 se comenzó a comercializar autos eléctricos en Chile, actualmente la cantidad de vehículos vendidos no supera las 50 unidades. En este escenario, la Intendencia Metropolitana estudiará la posibilidad de incorporar una flota de estos autos para ser arrendado a los santiaguinos que necesiten desplazarse por la capital. Este estudio será financiado por Ile de France (municipalidad de París), por medio de un convenio que existe entre ambas instituciones.
La idea es imitar el modelo que existe en la capital francesa, donde se establecen seis o siete vehículos de talla pequeña en distintos puntos de la ciudad. Se paga un arriendo anual (cerca de 150 euros) y luego el pago es por minuto usado.
Cuando el vehículo se arrienda, se informa a qué punto se quiere llegar, por lo que reservan un estacionamiento en la siguiente estación. Los trayectos promedios son de 35 minutos y cerca de 100 mil personas lo utilizan anualmente.
"El próximo año cumplimos 20 años de relación de la región con Île de France. En la reunión de la semana se redefinieron las prioridades de este convenio y entre ellas salió el tema medioambiental, tanto el cambio climático como reciclaje y temas de recambio energético (...) en ese marco salió este estudio, para evaluar la posibilidad del arriendo de autos eléctricos en Santiago, que es como ocurre en París", explicó el Intendente Metropolitano, Claudio Orrego.
La autoridad aseguró que el factor económico es uno de los principales problemas para adquirir este tipo de autos. "Siendo más económicos en su operación, son más caros en su adquisición. Por lo mismo, una de las cosas que queremos evaluar es la posibilidad del arriendo de vehículos, como quien arrienda bicicletas públicas para andar y ocupar por un rato", sostuvo la autoridad.
Dentro de los beneficios que tiene este tipo de transporte, además del impacto medio ambiental, es la seguridad de encontrar un lugar donde estacionarlo.
"Yo creo que en Chile sí se puede hacer este tipo de iniciativas, solamente falta la voluntad. No veo por qué no se podría hacer, si son autos de tallas reducidas, no contaminantes. Es más cómodo desde todo punto de vista. El estacionamiento está reservado y las distancias que se recorren aquí son compatibles con las características de los autos", aseguró Roberto Romero, vicepresidente de la región de la Île de France.
La modalidad que se utiliza en París es por medio de concesión adjudicada a una empresa, donde la inversión se recupera principalmente vía publicidad.
Según el seremi de Transporte Metropolitano, Matías Salazar, se proyecta que para finales de este año tengamos cerca de 70 taxis eléctricos circulando. "El problemas es que este tipo de autos es caro de adquirir (...) queremos diseñar una política de incentivo para los autos eléctricos" puntualizó Salazar.