Hay tranquilidad y todo está bajo control. Ese es el panorama que describe el intendente de la Región de Los Lagos, Juan Sebastián Morales, con respecto a la evacuación de las zonas que están en riesgo tras la erupción del cordón volcánico el Caulle.
De acuerdo a lo informado a La Tercera, el problema mayor que se vive en estos momentos en la región es el corte de caminos, por la caída de material piroclástico y cenizas. Sin embargo, lo que más conmueve a la autoridad regional es la necesidad que tienen las personas evacuadas, de dejar forraje a sus animales, y alimento.
"Para nosotros el tema con la gente es lo más delicado, estamos en una operación todos los días, para llevarlos a sus lugares de trabajo entre las 9.00 horas de la mañana bordeando las 14.00 horas", explica el intendente, agregando que "lo único que quieren es llegar a sus casas y alimentar a sus animales, es impresionante ver la necesidad que tienen".
Morales aseguró que dada la evacuación más cercana al cordón, no se han registrado robos en las casas que han quedado sin moradores, ya que sólo se deja ingresar ala lugar a los propietarios.
Por otro lado, aseguró que no se han registrado denuncias de personas que estén siendo obligadas a trabajar en los predios. "Lo que nosotros hemos hecho y la seremi del Trabajo ha estado en ronda, es dar la instrucción de ir a hablar con los trabajadores para ver su condición y de dejarles en claro que tienen todo el derecho a no estar haciendo nada de manera forzada".
En Región de Los Lagos la situación de los albergados es algo más tranquila que en la zona de Los Ríos, ya que son sólo 45 las personas que se encuentran en albergues, ya que el resto prefirió alojarse en los inmuebles de sus familiares.