El gobierno, a través del Ministerio del Interior, ofició a Carabineros para que entregara un informe sobre el caso del sargento que multó y detuvo a un superior por conducir en estado de ebriedad, en la comuna de Arauco, en la VIII Región.

El procedimiento terminó con la baja del capitán Alejandro Sáez, y el sumario administrativo contra el sargento que adoptó el control, Luis Bustos. La indagación interna investiga presuntas faltas al protocolo por parte del suboficial.

El caso, que se hizo conocido la noche del martes tras un reportaje de TVN, generó preocupación en el gobierno. Esto, porque en el Ejecutivo se busca que este hecho no dañe la imagen de la institución policial.

En la nota del noticiario se puede observar que el procedimiento fue grabado por un civil, y que el capitán dado de baja protestaba por ser controlado.

Ayer el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, indicó que "he pedido el informe del caso en detalle, pero aquí lo relevante es que la persona que fue sorprendida manejando en estado de ebriedad, que es el capitán, ha sido dado de baja por las autoridades máximas de Carabineros y eso es lo que corresponde".

Por su parte, el subsecretario de Interior, Mahmud Aleuy, dijo que el sumario debería estar finalizado en los próximos días y que "una vez que esté terminado el informe Carabineros nos informará las medidas".

La disputa también se encuentra en tribunales, pues Bustos presentó un recurso de protección contra Carabineros, en que alega que ha sido víctima de hostigamientos y pide que se revise la investigación administrativa que se ha desarrollado en su contra.

En el documento quedó plasmada la versión del sargento de lo que ocurrió la madrugada del 2 de febrero, momento en que se hizo el procedimiento. El policía indicó que se encontraba de jefe del tercer turno de patrullaje y que "fue advertido y requerido por civiles, respecto de un conductor en un vehículo motorizado que lo hacía en estado de ebriedad. Como corresponde se acercó al móvil indicado, donde un grupo de personas realizaba filmaciones con sus celulares y tablet. De inmediato se dio cuenta que se trataba de uno de sus jefes de unidad, quien ante la presencia del personal de servicio, cerró las puertas de su vehículo y simuló dormir". En el escrito, Bustos indicó que tras darse cuenta de esta situación, se comunicó con sus superiores, sin que nadie se haya hecho cargo, por lo que se vio obligado a tomar el control.

Fuentes que conocieron el sumario interno indicaron que si bien el control se realizó sin reparos, sí habrían existido faltas antes y después de la detención. Esto, porque habría indicado a otros compañeros de unidad que le haría un seguimiento al capitán y buscaría a una persona que lo grabara cuando estuviera en estado de ebriedad.

Respecto a esto, el abogado de Bustos, Carlos Montanares, dijo que "esta versión es bastante pintoresca. El sargento era jefe de servicio y en Arauco sale sólo una patrulla para toda la comuna, por lo que encuentro muy difícil que haya tenido tiempo para salir a la caza de este capitán".

El abogado, asimismo, indicó que tras el operativo el uniformado "ha sufrido de hostigamientos. Le dio un síntoma depresivo ansioso por esta situación, por lo que tuvo que tomar una licencia médica". Esta semana se presentaron cargos contra Bustos, y se recomendó la expulsión de Carabineros. Ahora el policía debe presentar sus descargos.

Versión de Carabineros

El jefe del Departamento de Comunicaciones Sociales de Carabineros, coronel Mario Rozas, indicó que "no hay un manto de protección sobre el capitán, porque él fue descubierto, fue expulsado de la institución y los antecedentes del caso fueron expuestos en el tribunal correspondiente". Respecto a la eventual creación de un reglamento para el caso que un carabinero deba detener a un superior, dijo que no era necesario porque "hay un protocolo generalizado, en base al respeto de las personas".