Más de 50.000 personas necesitan ayuda urgente en Sudán después de que sus viviendas fueran destrozadas por las inundaciones en seis estados del país, dijo la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (IFRC).

Para poder atender las necesidades más urgentes de estos desplazados en materia de alimentación, vivienda y sanidad, la organización lanzó hoy un llamado de más de un millón de euros a la comunidad internacional.

Debido a las lluvias torrenciales que afectan a la región desde hace tres semanas, 20 personas han muerto y otras 30 han resultado heridas, explicó.

Además, señaló que "comunidades enteras en Jartum quedaron sin hogar tras las lluvias del pasado 26 de agosto, que derribaron 20.000 casas".

Asimismo, las carreteras permanecen intransitables en el país, lo que impide la asistencia de ayuda humanitaria a los pueblos más remotos, y no hay acceso a agua potable.