AUNQUE tradicionalmente las acciones son la inversión más rentable, el año pasado tuvo más sentido arrendar una oficina que apostar al Ipsa. Incluso fue más rentable comprar dólares que un fondo mutuo balanceado. Y luego llegaron las vacaciones y la Bolsa siguió cayendo, dejando a todo quien quiera ponerse aplicado con su dinero con una fuerte incertidumbre: ¿Dónde pueden rentar más mis fondos?, se preguntan muchos ahora que llega marzo.

Pese al pobre inicio de 2014 para la Bolsa (ha perdido 2% en el año), los especialistas dicen que este año no van a faltar oportunidades rentables. De hecho, el índice es sólo un promedio de las cotizaciones de las acciones con mayor presencia y varias acciones incluso en lo que va del año han anotado rentabilidades de dos dígitos.

Hay, asimismo, varias "promesas" en la Bolsa local: acciones con upsides de 10%, 20%, 40% y más, de acuerdo con distintos análisis.

En el plano general, sin embargo, el mercado seguirá dominado por los ruidos externos en los próximos meses. La volatilidad debiera pasar y el panorama tranquilizarse sólo a partir del segundo semestre, advierten los analistas.

La caída del Ipsa no es aislada y se verificó en las plazas bursátiles más importantes del mundo. Una de las inversiones más exitosas del año pasado, el índice S&P 500 (haber invertido en un índice que lo replicara habría rentado casi 30%) ha caído 0,8% en lo que va de 2014, mientras que los mercados emergentes en general se han desplomado 5%.

Esto es producto de una aversión al riesgo que en la práctica produjo una fuerte salida de capitales desde los emergentes, lo cual condujo a depreciaciones del tipo de cambio. De hecho, este año los flujos de capital a los emergentes serán US$ 1,1 billones más bajos, merma que no se registraba desde el año 2009, según el Instituto de Finanzas Internacionales (IIF). Como porcentaje del PIB de esos países, serán los menores desde 2003.

Todo esto deriva principalmente del retiro de los estímulos monetarios de la Reserva Federal de EE.UU. y de las dudas sobre la reactivación en ese país. El primer factor, que involucra alza de tasas de mercado en EE.UU. relativa a las de los emergentes, conduce a que salga capital desde éstos para invertirlos en EE.UU. El factor de la desaceleración se ve potenciado por el temor de que las turbulencias en los mercados emergentes terminen contagiando a EE.UU. y al resto de los mercados maduros.

Esta situación se da en un contexto en Chile en que el crecimiento estaría desacelerándose y el Banco Central rebajando su tasa de interés de referencia. No obstante, estos elementos se comienza a anticipar una recuperación de la Bolsa. Aunque tenue, su retorno esperado dominará al resto de las clases de activos.

PRIMEROS MESES VOLATILES

"Sabíamos que el mercado iba a estar un poco volátil en este comienzo de año y, probablemente, tengamos que reducir nuestra estimación de Ipsa hacia fin de año", dice Vicente Meschi, subgerente de estudios de CorpResearch.

Si a fin del año pasado Meschi creía que el Ipsa cerraría 2014 en 4.200 puntos (un alza de 14% respecto de los 3.699 con que cerró diciembre), ahora cree que estará más cerca de 4.000 puntos (suba de 8%).

Francisco Errandonea, gerente de estudios de Santander GBM, advierte que "no vamos a cambiar nuestra estimación de Ipsa porque creemos que la volatilidad va a reducirse conforme los inversionistas distingan a los mercados emergentes con buenos fundamentos, como Chile, de los más turbulentos".

Esto involucra que el primer semestre seguirá siendo volátil. "En el segundo semestre debiéramos tener una situación más tranquila", añade.

Las claves serán estar atento a que no cambie el supuesto de que la economía global se expandirá más que en 2013 (3% este año versus 2,5%, estima el IIF) y que no se verifiquen los principales riesgos.

El mayor, según el IIF, está en EE.UU. Hay una probabilidad de 40% de que se produzcan grandes correcciones de mercado si es que se anticipan cambios en la trayectoria de los retiros de estímulos de la Fed. Esto podría ser gatillado por señales en el mercado laboral.

En EE.UU. esas correcciones afectarían a sectores muy sensibles a las tasas de interés y la volatilidad dañaría la confianza. A nivel global, se verían más fugas de capital desde los mercados emergentes, afectando a aquellos con grandes déficits en cuenta corriente. Las tasas de mercado en general subirían, lo que en general, produce pérdidas de capital en renta fija.

El otro gran riesgo son los mercados emergentes, donde según el IIF hay una chance de 35% de que las turbulencias vinculadas a la aversión al riesgo se intensifiquen, conduciendo a un contagio entre estas plazas. Será clave observar los movimientos acoplados de los precios de activos, salidas de institucionales y la firmeza de las respuesta de política económica.

APOSTANDO AL ALZA DE LA BOLSA LOCAL

VERDE: Para la mayoría de los analistas, el Ipsa debiera ser el activo ganador este año por rentabilidad, sea si renta 8% (4.000 puntos) o 14% (4.200). En 2013, mientras el Ipsa cayó 14%, la renta variable de países desarrollados rentó un 8,7%. "Mantenemos nuestra proyección de 4.200 a fin de año", dice Daniel Thenoux, gerente de estrategia de Tanner Corredores de Bolsa. Los precios actuales ya tendrían incorporados elementos como la desaceleración económica, la reforma tributaria, el aumento del costo de la energía, commodities resentidos o el efecto de tasa máxima convencional en las empresas de retail. "Buena parte de la caída ya se sufrió; es difícil que la Bolsa baje más", coincide Vicente Meschi, quien incluye en su cartera las acciones de Gener, Ripley, CMPC y Banco de Chile.

AMARILLO: Buena parte de las oportunidades en el Ipsa están en que la valorización actual está barata. La relación precio-utilidad típicamente se encuentra en las 18,8 veces. Sin embargo, las valorizaciones actuales dan 16,1 veces, de acuerdo con cálculos de Bice Inversiones. Pero está la volatilidad. "No creo que sea buena idea invertir en acciones en este momento", debido a la alta variabilidad de las cotizaciones, opina el economista Alejandro Alarcón, ex gerente de la Asociación de Bancos, quien piensa que más seguro es colocar dinero en renta fija (ver recuadro). "Mientras el mercado se estabiliza son preferibles estos instrumentos", dice. Pero, a juicio de Thenoux, "el mayor retorno de la Bolsa parece justificar razonablemente el riesgo".

ROJO: "Será un año complicado para el Ipsa", dice la economista y estratega Gabriela Clivio, quien le ve al índice un upside de sólo 5% sobre su nivel actual, lo que lo llevaría a 3.800 puntos a fin de año.

Clivio anticipa que la evolución de flujos en Chile será mala en el corto plazo, dada la depreciación del peso. Si el tipo de cambio sube, como está pasando ahora, la rentabilidad de un inversionista extranjero en dólares cae.

Luego, el cobre entrampado afuera y la fuga de flujos hacen del dólar una alternativa. Las estimaciones lo sitúan en torno a $560, pero también rozando los $600, según algunas visiones, de lo que derivaría una rentabilidad de hasta 7%.

RENTA VARIABLE INTERNACIONAL

VERDE: Sin repetir el 30% del año pasado, las acciones estadounidenses debieran rentar un 15% en lo que queda del año con relativa seguridad.

Mientras la reactivación del resto del mundo desarrollado depende de sus exportaciones, EE.UU. está creciendo sobre sus propios fundamentos. Esto implica que los sectores asociados a la demanda interna van a tener un impulso.

Inversionistas sin capital suficiente para construir una cartera diversificada pueden participar de ese ímpetu adquiriendo ETF (instrumentos que replican sectores o índices). Aquellos con capital, dice Clivio, debieran ir por acciones de consumo discrecional (Amazon, Macy's), ligadas al ocio (Disney) y a la banca (JP Morgan, Capital One).

AMARILLO: Si bien Europa se recupera, la sensación es que lo hace sobre una base distinta a la de EE.UU., es decir, sólo porque tiene una base muy baja de comparación (el año pasado la eurozona estaba en recesión). Así, aunque las acciones europeas están entre las favoritas en muchas ponderaciones, en otras apenas están representadas. Los especialistas sugieren exponerse a mercados como el Reino Unido, Alemania y Francia. La periferia, con toda la inestabilidad asociada, y los mercados emergentes de Europa del Este quedarían descartados. Estos últimos, además de vivir crisis propias, como Ucrania, están demasiado ligados a Rusia, que muestra crecientes grados de convulsión.

ROJO: En general, los mercados emergentes debieran quedar como máximo muy levemente ponderados en una cartera segura, dicen los expertos. Países como Brasil, Sudáfrica y Turquía tienen altos desequilibrios externos que los hacen vulnerables a crisis si la fuga de capitales persiste.

En Brasil el mercado lleva meses anticipando una reducción del rating crediticio, lo cual podría provocar más fugas, ya que muchos institucionales siguen pautas sobre la calidad crediticia de los instrumentos que compran. Una excepción en los emergentes podría ser México debido a que las fichas puestas ahí en el fondo están jugadas a la reactivación de EE.UU., la cual tradicionalmente favorece a ese país.

RENTA FIJA

VERDE: Para 2014, probablemente, la mejor inversión en renta fija sean los bonos corporativos locales. Con spreads que van desde menos de un punto porcentual a sobretasas de 4,5 puntos, este mercado es relativamente seguro en Chile, ya que salvo excepciones no hay emisores con clasificación de insolvencia.

Un ítem al que poner atención es la perspectiva de que una agencia clasificadora le suba el rating a algún emisor. Eso supondría una baja de su tasa de interés, lo cual provocaría una ganancia de capital. Los analistas, sin embargo, no tienen candidatos claros en este punto.

En general, el sector debiera rentar en torno a 6% anual, dice Thenoux.

AMARILLO: Con una rentabilidad inferior, pero con varios partidarios, el sector de bonos estatales (de la Tesorería o pagarés del Banco Central) es también una alternativa segura de inversión. Ahora, se está recomendando a los inversionistas ir hacia papeles en UF. Las compensaciones inflacionarias o expectativas de inflación, medidas como la diferencia entre la tasa de interés de los papeles nominales e indexados están bajas, bajo 3% a 10 años y menores plazos. Pero el mercado está anticipando que la depreciación cambiaria se va a traspasar a precios en el corto plazo. Una compensación inflacionaria al alza eleva también las tasas nominales, movimiento que genera pérdidas al inversionista.

ROJO: "En este mercado conviene invertir en money markets: depósitos de corto plazo, pactos de recompra y otros instrumentos cortos, cuya gracia es que son muy líquidos", dice Alarcón. Pero éstos están ocupando una porción menor en las carteras de renta fija.

En un contexto donde las acciones devengarían a tasas de dos dígitos y, los bonos, hasta 6%, los especialistas no hayan mucho sentido ir a depósitos, que rinden en torno a 0,3% al mes.

Otra gran duda es la renta variable internacional. Mientras la tasa de los bonos del Tesoro de EE.UU. sube, los spreads de los bonos corporativos con grado de inversión están muy comprimidos. Una alternativa pueden ser los llamados high yield (alto rendimiento).

MERCADO INMOBILIARIO

VERDE: En 2013, la inversión inmobiliaria fue una de las más rentables, según datos de Marc Royer, director de servicios de transacciones de CBRE. El retorno anual para un inversionista rentista varió entre un rango de 6,25% y 7% en el sector residencial a uno de 8,5%-9,5% en el área de bodegas logísticas. En el medio se ubicaron las rentabilidaddes del sector hoteles (de cuatro a cinco estrellas; 7,75% - 8,5%), de oficinas (entre 7% y 7,5%), y de locales comerciales premium o "high street", que Royer sitúa en 6,75% a 7,5%. "Debido a la baja que están experimentando las tasas de interés, puede ser muy rentable tomar un crédito hipotecario y participar en el mercado inmobiliario", opina Alarcón. Para Thenoux, esto es riesgoso. Explica que "de esa misma forma empezó la crisis subprime en EE.UU., con endeudamiento al alza y miren lo que pasó. Las inversiones hay que hacerlas con plata libre".

AMARILLO: El negocio, eso sí, no experimentará un boom. Royer explica que no se prevé que la rentabilidad, suba este año, manteniéndose estable respecto de 2013, "dado que existe aún mucha liquidez en el mercado, buen nivel de financiamiento y apetito por invertir por parte de los institucionales e inversionistas privados". Agrega que "con el aumento de la liquidez en el mercado inmobiliario, en la forma de mayores actores en el mercado con fondos para invertir en real estate, y la institucionalización del mismo en los últimos años, los retornos de las inversiones en propiedades han ido bajando". "Este negocio fue muy bueno hace unos años, pero los precios tienden a estabilizarse", opina Clivio. "Comparado con activos financieros -agrega- hay que movilizar grandes sumas de capital, por mucho tiempo y sin la misma liquidez. Yo no recomiendo activos inmobiliarios".