La tesis, parte de un Proyecto Anillo del Centro de Sistemas Públicos de la Universidad de Chile y que fue supervisada por la académica Alejandra Mizala, estudió datos de 2.166 establecimientos municipales, midiendo la eficiencia -capacidad de obtener el máximo resultado con los recursos con los que cuentan- de cada uno y luego del municipio.

Para medir este resultado se consideró el puntaje alcanzado por el colegio en el SIMCE, la mejora de este puntaje entre dos pruebas consecutivas y la tasa de retención de los alumnos en el establecimiento. Para poder comparar dos establecimientos totalmente distintos, se incluyó en el índice construido factores como la vulnerabilidad de los alumnos del colegio, el ingreso familiar promedio, la educación de las madres y recursos por alumno.

"Los resultados señalan que existe una gran variabilidad en el desempeño de los establecimientos de un mismo municipio, lo que da cuenta de un impacto más bien limitado de la gestión del Sostenedor sobre los establecimientos a su cargo y donde los resultados dependerían fundamentalmente del esfuerzo individual de algunos establecimientos", dice la autora.

Los municipios eficientes –que tienen una mayoría de colegios con alto índice de eficiencia- resultaron no ser precisamente los menos vulnerables, más grandes o con más recursos: Las Condes, La Reina y Lo Barnechea, por ejemplo, están en el segmento de los poco eficientes. Al contrario, entre los más eficientes se encuentran municipios tan distintos en como Providencia, Isla de Maipo y Renca.
Ante la alta variabilidad en la eficiencia de los establecimientos al interior del mismo municipio, la autora expresó que refleja "la necesidad de estrategias diferenciadas y la importancia de los equipos directivos".

Loreto Diztel, Secretaria General en Corporación Municipal de Peñalolén, quien asistió a la presentación comentó: "Existen muchos juicios y prejuicio  sobre que la educación pública es mala. Este estudio es valioso porque permite preguntarnos por qué es mala, dónde es mala, estar abiertos a que lo haga quien lo sabe hacer mejor y trabajar en conjunto".

La investigación, que incluyó entrevistas con sostenedores, encontró que uno de los puntos comunes entre los municipios eficientes son las buenas prácticas de gestión: equipos directivos competentes y comprometidos y con un fuerte respaldo del alcalde.