Luego de que se viralizara en redes sociales un video que mostraba la brutal agresión al perro "Cholito", en el barrio Patronato, comuna de Recoleta, la problemática del maltrato animal aumentó su visibilidad. Sin embargo, desde hace años que son cientos las personas que, tras presenciar hechos de esta índole, deciden denunciar.
De eso dan cuenta cifras entregadas por la Brigada de Delitos Contra el Medio Ambiente y Patrimonio Cultural (Bidema), de la PDI, que desde su creación, en 2002, ha dado cuenta del maltrato animal como una de las principales causas de denuncias recibidas en la unidad. Durante 2014, esta categoría alcanzó un 91%.
En 2016, la Bidema investigó 866 delitos por maltrato animal en todo Chile, de los cuales el 40% corresponde a la Región Metropolitana, seguida por Valparaíso (9%). Además, en 2016 se registró un 15% de aumento respecto del año anterior, cuando el total de investigaciones a nivel país llegó a 750.
La Región del Maule, en particular, presentó durante 2016 un 78% más de investigaciones que el año anterior. Situación que, según Loretto Ibarra, miembro de la agrupación Amigos de los Animales Hualañé, se ha visto reflejada en el número de animales que rescatan cada mes: "Entre los perros y gatos que dejan en el canil, y los que están abandonados en las calles, son aproximadamente 15 los que rescatamos mensualmente".
Otro dato relevante es que, desde 2014, la Bidema recibe al menos tres denuncias por cada región, lo que da cuenta de una situación que se sostiene en el tiempo. Para Claudia Gallardo, miembro de la agrupación "Unidos por Cholito" -creada a propósito del emblemático caso-, "el aumento en las denuncias se debe a que hay mayor compromiso y conciencia sobre el tema del maltrato animal, pero también creo que la gente, definitivamente, está perdiendo el miedo".
En esta misma línea, Valeska Andrade, veterinaria y subcomisaria de Bidema, sostuvo que "generalmente, quienes denuncian son vecinos, personas que transitan el lugar o gente que se entera a través de las redes sociales y va hasta el sitio del incidente".
Además, la veterinaria explicó que una vez que se recibe la denuncia y se verifica que realmente se constituye el posible delito de maltrato animal, "nosotros vamos al lugar, tomamos declaraciones de testigos y nuestro personal especializado, compuesto fundamentalmente por médicos veterinarios, hace una evaluación externa al animal".
Desde la Fundación Suyai, su presidenta y sicóloga, Carolina Pino, indicó que las acciones que pueden ser calificadas como delito en esta materia "van desde cuando el animal está privado de espacio, de alimento, de una casa, hasta una patada o casos aberrantes, como animales que han sido acuchillados y atacados con otras cosas".
Tras la denuncia
En la Bidema no cuentan con espacio físico suficiente para mantener a los animales maltratados. Sin embargo, la subcomisaria Andrade explicó que "si vemos que los dueños de las mascotas no tienen interés en cuidarlas, tratamos de agotar todos los medios para darles un nuevo hogar".
En esas instancias es donde las fundaciones de rescate animal pasan a jugar un rol importante. La presidenta de Fundación Suyai manifestó que en esos casos "buscamos el adoptante idóneo para la mascota y viceversa. Una vez que se encuentra el mejor vínculo, se hace la entrevista y entregamos a la mascota desparasitada, vacunada, esterilizada y muy limpia. Después realizamos seguimientos y, afortunadamente, tenemos un balance muy positivo".